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1 Pedro 1:25 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

25 pero la palabra del Señor permanece para siempre». Y esta es la palabra del evangelio que se les ha anunciado a ustedes.

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Biblia Reina Valera 1960

25 Mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

25 Pero la palabra del Señor permanece para siempre». Y esta palabra es el mensaje de la Buena Noticia que se les ha predicado.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

25 pero la palabra del Señor permanece eternamente. Esta palabra es el Evangelio que se les ha anunciado a ustedes.

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La Biblia Textual 3a Edicion

25 Pero la palabra del Señor permanece para siempre.° Y ésta es la palabra anunciada a vosotros por el evangelio.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 pero la palabra del Señor permanece para siempre. Ésta es la buena nueva que os anunciaron.

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1 Pedro 1:25
23 Tagairtí Cros  

mientras tú, oh Señor, reinas para siempre. Tu fama permanecerá por todas las generaciones.


Ellos perecerán, pero tú permanecerás para siempre. Ellos se desgastarán como vestiduras viejas, y tú como ropa los cambiarás, y los dejarás a un lado.


Tu palabra, Señor, es eterna, y permanece firme en el cielo.


La voz ahora dice: ―¡Grita! ―¿Qué debo gritar? —pregunté. ―Di a gritos que todo hombre y mujer es como hierba que se marchita, y que toda su belleza se aja como las flores que languidecen.


La hierba se seca, y se marchita la flor, pero la Palabra de nuestro Dios permanecerá viva para siempre.


Les aseguro que mientras existan el cielo y la tierra, ni la parte más pequeña e insignificante de la ley se pasará por alto, hasta que esta se cumpla totalmente.


Pero es más fácil que desaparezcan el cielo y la tierra, que deje de cumplirse una sola tilde de la ley.


Antes que nada existiera, ya existía la Palabra, y la Palabra estaba con Dios porque aquel que es la Palabra era Dios.


Y la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y hemos visto su gloria, la gloria que le pertenece al Hijo único del Padre, en el que abundan el amor y la verdad.


porque me había propuesto hablar sólo de Jesucristo y de su muerte en la cruz.


Cristo vino a proclamar las buenas nuevas de paz a ustedes que estaban lejos y a nosotros que estábamos cerca.


Aunque soy el más pequeño de todos los que son parte del pueblo santo, Dios me concedió, por su amor, la misión de anunciar a las naciones el tesoro incalculable de Cristo.


y ahora, a su debido tiempo, ha cumplido esta promesa por medio de las buenas noticias que, por mandato de Dios, nuestro Salvador, me han sido encomendadas proclamar.


han saboreado la Palabra de Dios y los poderes del mundo venidero,


A ellos se les hizo saber que no se estaban sirviendo a ellos mismos, sino a ustedes. Los profetas hablaban de las cosas que ahora les han anunciado a ustedes los que les predicaron el evangelio con el poder del Espíritu Santo que fue enviado desde el cielo. Los mismos ángeles quisieran contemplar estas cosas.


pues ustedes han nacido de nuevo, no de padres mortales, sino de la palabra de Dios que vive y permanece.


Como niños recién nacidos busquen con ansias la leche pura de la palabra. Así, por medio de ella crecerán en su salvación,


Así comprobamos el cumplimiento de las profecías, y ustedes hacen bien en examinarlas cuidadosamente. Ellas son como antorchas que disipan la oscuridad, hasta que el día esclarezca y la estrella de la mañana brille en sus corazones.


Les anunciamos a ustedes la Palabra de vida que desde el principio ya existía. ¡Nosotros mismos la oímos, la vimos con nuestros propios ojos y la palpamos con nuestras manos!


La predicamos a ustedes para que junto con nosotros participen también de la comunión que disfrutamos con el Padre y con Jesucristo, su Hijo.


Y vi que otro ángel cruzaba los cielos con las eternas buenas nuevas, e iba proclamándolas a cada nación, raza, lengua y pueblo.


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