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Proverbios 4:24 - Biblia Lenguaje Básico

24 Evita decir cosas falsas, pronunciar palabras maliciosas.

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Biblia Reina Valera 1960

24 Aparta de ti la perversidad de la boca, Y aleja de ti la iniquidad de los labios.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

24 Evita toda expresión perversa; aléjate de las palabras corruptas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

24 Rechaza cualquier lenguaje perverso, abstente de cualquier mentira.

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La Biblia Textual 3a Edicion

24 Aparta de ti la boca perversa, Y aleja de ti la falsedad de labios.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 Aparta de ti la falsedad de la boca, aleja de ti el engaño de los labios.

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Proverbios 4:24
16 Tagairtí Cros  

si te apartas del mal y no permites en tu familia la injusticia,


dejad de hablar mal de otros y de andar diciendo mentiras;


Los buenos dicen cosas agradables; las palabras del malvado son siempre ofensivas.


Al que es mal intencionado nunca le irá bien; al que es mal hablado siempre le irá mal.


Más vale ser pobre y honrado que ser necio y de lenguaje retorcido.


Que tu mirada sea sincera, que refleje siempre honradez.


Hay gente mala y sinvergüenza que anda contando mentiras;


Respetar a Dios lleva consigo aborrecer la maldad. Yo aborrezco a la gente que es orgullosa y presumida, que nunca dice la verdad ni vive como es debido.


Apartaos de todas las maldades que habéis cometido contra mí. Volved a amarme de todo corazón y renovad vuestra vida. ¡No tenéis por qué morir, israelitas!


Pero ahora tenéis que abandonar todo eso; así que no os dejéis llevar por la ira, el rencor o el deseo de hacer el mal; no ofendáis a Dios ni insultéis a vuestros semejantes.


y peleas en todo momento. Los que hacen eso no son capaces de pensar bien, no conocen la verdad y piensan que, por medio de la religión, pueden ganar mucho dinero.


Por eso, dejad de hacer lo malo, pues ya hay mucha maldad en el mundo. Hacer el mal es como llenarse de suciedad por dentro. Más bien, recibid con humildad el mensaje que Dios os ha dado, un mensaje que tiene poder para salvaros.


Si alguien se cree muy santo, pero no cuida sus palabras, se engaña a sí mismo y de nada le sirve tanta religiosidad.


Por lo tanto, dejad de hacer el mal. No digáis mentiras, ni seáis hipócritas, envidiosos o chismosos.


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