Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Números 10:30 - Biblia Lenguaje Básico

30 Pero Jobab le contestó: —No, gracias. Prefiero regresar a la región en donde viven mis parientes.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

30 Y él le respondió: Yo no iré, sino que me marcharé a mi tierra y a mi parentela.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 —No, no iré —respondió Hobab—. Debo regresar a mi propia tierra y a mi familia.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Jobab le respondió: 'No iré con ustedes sino que volveré a mi país donde mi familia.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Pero él le dijo: No iré, sino que a mi tierra y a mi parentela he de irme.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Pero él respondió: 'No iré; me volveré a mi tierra y a mi parentela'.

Féach an chaibidil Cóip




Números 10:30
12 Tagairtí Cros  

Dios dijo a Abrán: —Deja a tu pueblo y a tus familiares, y vete al lugar que te voy a mostrar.


Entiendo que tuvieras ganas de volver a la casa de tu padre, pero no tenías por qué robarme mis dioses.


Hay bellas princesas en tu corte; sentada a tu derecha está la reina, adornada con joyas de oro fino.


Tiempo después, Moisés despidió a su suegro, y este regresó a su país.


Jesús también les dijo: —¿Qué opináis de esto que os voy a contar? Un hombre tenía dos hijos; se acercó a uno y le dijo: «Hijo, vete hoy a trabajar en la viña».


Él le respondió: «¡No quiero ir!». Pero después cambió de idea y fue a trabajar.


—Si alguno de vosotros quiere ser mi discípulo, tendrá que quererme más que a su padre o a su madre, más que a su mujer o a sus hijos, y más que a sus hermanos o hermanas, incluso más que a su propia vida.


A partir de ahora, ya no valoraremos a los demás desde el punto de vista humano. Y aunque antes valorábamos a Cristo de esa manera, ya no seguiremos valorándolo así.


Todas las personas que hemos mencionado murieron sin recibir las cosas que Dios les había prometido. Pero como tenían fe en Dios, las vieron desde lejos y se alegraron, pues sabían que en este mundo estaban de paso y eran como extranjeros.


Abrahán tuvo fe en Dios, y por eso obedeció cuando Dios le ordenó que saliera del país en que vivía para ir a la tierra que le iba a dar en herencia, sin saber, además, adonde iba.


Los quenitas, que eran descendientes del suegro de Moisés, salieron de Jericó junto con la tribu de Judá, y se fueron al desierto que está al sur de Arad. Allí se quedaron a vivir.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí