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Mateo 13:37 - Biblia Lenguaje Básico

37 Jesús les dijo: —El que siembra la buena semilla de trigo soy yo, el Hijo del hombre.

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Biblia Reina Valera 1960

37 Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

37 Jesús respondió: —El Hijo del Hombre es el agricultor que siembra la buena semilla.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

37 Jesús les dijo: 'El que siembra la semilla buena es el Hijo del Hombre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

37 Él respondió y dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

37 Él les respondió: 'El que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre;

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Mateo 13:37
16 Tagairtí Cros  

Cuando una persona os recibe, también me recibe a mí. Y cuando una persona me recibe a mí, también recibe a Dios, que es el que me ha enviado.


Jesús les contó otra parábola: —En el reino de Dios sucede lo mismo que le pasó a uno que sembró en su campo semillas muy buenas de trigo.


Entonces fueron adonde estaba el dueño del campo y le dijeron: «Señor, has sembrado buenas semillas de trigo, ¿por qué ha crecido también la cizaña?».


—Un sembrador salió a sembrar trigo. Mientras sembraba, algunas semillas cayeron en el camino; poco después vinieron unos pájaros y se las comieron.


Yo, el Hijo del hombre, enviaré a mis ángeles para que saquen de mi reino a todos los que hacen lo malo y obligan a otros a hacerlo;


Jesús le contestó: —Las zorras tienen cuevas y las aves tienen nidos, pero yo, el Hijo del hombre, no tengo un lugar donde descansar.


Luego Jesús les dijo a sus discípulos: —Cualquiera que os escuche a vosotros, me escucha a mí y cualquiera que os rechace a vosotros, a mí me rechaza; y la persona que me rechaza, rechaza también a Dios, que fue quien me envió.


Si alguien recibe al que yo envío, me recibe a mí. Y el que me recibe a mí, recibe también al que me ha enviado.


Jesús los saludó de nuevo diciendo: —¡Que la paz esté con vosotros! Luego añadió: —Como mi Padre me envió, así también yo os envío a vosotros.


Pero quiero que sepáis que el Espíritu Santo vendrá sobre vosotros, y que recibiréis poder para hablar de mí en Jerusalén, en todo el territorio de Judea y de Samaría, y hasta en los lugares más lejanos del mundo.


En realidad, solo hablaré de lo que Cristo hizo a través de mí para lograr que los no judíos obedezcan a Dios. Y lo he logrado, no solo por medio de mis palabras, sino también por mis hechos.


Hace mucho, mucho tiempo, los profetas comunicaron el mensaje de Dios a nuestros antepasados. Lo hicieron muchas veces y de muchas maneras.


con más razón seremos castigados nosotros si no reconocemos el gran valor de la salvación que él nos ofrece. Porque el mismo Señor Jesús fue el primero en comunicar el mensaje de salvación y después los que oyeron ese mensaje nos demostraron que era verdad.


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