Juan 3:27 - Biblia Lenguaje Básico

²⁷ Juan les contestó: —Nadie puede hacer algo si Dios no se lo permite.

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Biblia Reina Valera 1960

²⁷ Respondió Juan y dijo: No puede el hombre recibir nada, si no le fuere dado del cielo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁷ Juan respondió: —Nadie puede recibir nada a menos que Dios se lo conceda desde el cielo.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁷ Juan respondió: 'Nadie puede atribuirse más de lo que el Cielo le quiere dar.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁷ Respondió Juan y dijo: No puede un hombre recibir nada si no le ha sido dado del cielo.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁷ Juan contestó: 'Nadie puede asumir nada que no se le haya dado del cielo.

Juan 3:27 Tagairtí Cros

Jeremías 1:5

—Yo te elegí antes de que nacieras; te escogí para que hablaras en mi nombre a todas las naciones del mundo.

Jeremías 17:16

Yo no te he pedido, Dios mío, que castigaras al pueblo ni he deseado para él la desgracia; tú sabes bien cuáles han sido mis palabras pues las he pronunciado en tu presencia.

Amós 7:15

Si ahora hablo en nombre de Dios, es porque Dios mismo me pidió que dejara de cuidar el ganado y me envió a anunciar este mensaje a su pueblo Israel.

Números 17:5

y los israelitas quedaron advertidos de que nadie podía acercarse al altar de Dios para quemar incienso, a menos que fuera descendiente de Aarón. De lo contrario podría perder la vida como Coré y sus seguidores. Así se lo ordenó Dios a Moisés.

Mateo 25:15

El hombre conocía muy bien la capacidad de cada uno. Por eso, a uno de ellos le entregó cinco mil monedas, a otro dos mil y a otro mil. Luego se fue de viaje.

Marcos 13:34

Sucede lo mismo que cuando un hombre decide irse de viaje. Llama a sus empleados y les encarga que le cuiden la casa. A cada uno le encarga un trabajo y al portero le ordena que vigile.

Juan 10:41

muchas personas fueron a verlo, y decían: —Juan el Bautista no hizo ningún milagro, pero todo lo que dijo de Jesús era verdad.

Juan 6:65

También les dijo que nadie puede creer en él si Dios, que es su Padre, no se lo concede.

Romanos 1:5

Jesús me concedió su gracia y me eligió para que le sirva como apóstol, pues quiere que todo el mundo le obedezca y crea en él.

Romanos 12:6

Dios nos ha dado a todos diferentes capacidades, según lo que él quiso dar a cada uno. Por eso, si Dios nos autoriza para hablar en su nombre, hagámoslo como corresponde a un seguidor de Cristo.

1 Corintios 1:1

Queridos hermanos de la Iglesia de Dios en Corinto: Recibid saludos míos, y de nuestro hermano Sóstenes. Yo, Pablo, deseo de todo corazón que nuestro Padre Dios y el Señor Jesucristo os llenen de gracia y de paz. Dios me eligió para ser apóstol de Jesucristo, y también os eligió a vosotros para que viváis unidos a él y forméis parte de su pueblo elegido. Así estaréis unidos a nosotros y a todos los que adoran y alaban a nuestro Señor Jesucristo en todo el mundo.

1 Corintios 12:11

Pero es el mismo Espíritu Santo el que hace todo esto y el que decide qué capacidad conceder a cada uno.

1 Corintios 15:10

Sin embargo, Dios fue bueno conmigo y ha hecho de mí esto que ahora soy. No he echado a perder la gracia que me concedió, y trabajé más que los otros apóstoles; aunque en realidad todo lo hice ayudado por esa gracia especial de Dios.

1 Corintios 3:5

Después de todo, Apolo y yo solo somos servidores de Dios para ayudaros a creer en Jesucristo. Cada uno de nosotros ha hecho lo que el Señor nos mandó hacer:

1 Corintios 4:7

No hay nada que os haga más importantes que otros. Todo lo que tenéis, lo habéis recibido de Dios. Y si todo se lo debéis a él, ¿por qué presumís, como si vosotros solos lo hubierais conseguido?

Gálatas 1:1

Queridos hermanos de las iglesias de la región de Galacia: Yo, Pablo, y los seguidores de Cristo que están conmigo, os saludamos. Le pido a Dios, nuestro Padre, y al Señor Jesucristo, que os concedan su gracia y su paz. Soy un apóstol que no ha sido enviado por nadie de este mundo, sino por Jesucristo y por Dios Padre que lo resucitó de entre los muertos.

Efesios 1:1

Queridos hermanos de Éfeso: A vosotros, que pertenecéis al pueblo santo de Dios, y que seguís creyendo en Jesucristo y vivís muy unidos a él, os envío mis saludos. Yo, Pablo, soy apóstol de Jesucristo porque Dios así lo ha querido.

1 Timoteo 2:7

Dios me envió a anunciar esta buena noticia a los que no son judíos. Debo enseñarles la verdad y lo que significa creer en Dios. ¡Aseguro que no estoy mintiendo, sino que digo la verdad!

Santiago 1:17

Dios nunca cambia. Fue Dios quien creó la luz y es quien nos da todo lo bueno y todo lo perfecto.