Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Juan 13:33 - Biblia Lenguaje Básico

33 Hijos míos, dentro de poco ya no estaré más con vosotros. Me buscaréis, pero no me encontraréis. Os digo lo mismo que les dije a los judíos: No podéis ir adonde yo voy.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

33 Hijitos, aún estaré con vosotros un poco. Me buscaréis; pero como dije a los judíos, así os digo ahora a vosotros: A donde yo voy, vosotros no podéis ir.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

33 Mis queridos hijos, voy a estar con ustedes solo un poco más de tiempo. Y, como les dije a los líderes judíos, ustedes me buscarán, pero no pueden ir adonde yo voy.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

33 Hijos míos, yo estaré con ustedes por muy poco tiempo. Me buscarán, y como ya dije a los judíos, ahora se lo digo a ustedes: donde yo voy, ustedes no pueden venir.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

33 Hijitos, aún estoy con vosotros un poco. Me buscaréis, pero como dije a los judíos, también a vosotros os lo digo ahora: Adonde Yo voy, vosotros no podéis venir.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

33 'Hijitos, ya es poco el tiempo que voy a estar con vosotros. Me buscaréis y, como dije a los judíos, también os digo ahora a vosotros: a donde yo voy, no podéis venir vosotros.'

Féach an chaibidil Cóip




Juan 13:33
13 Tagairtí Cros  

Entonces Simón Pedro preguntó a Jesús: —Señor, ¿dónde vas a ir? Jesús le respondió: —Ahora no puedes venir conmigo. Después sí vendrás.


Dentro de poco, la gente de este mundo no podrá verme, pero vosotros sí me veréis. Y porque yo vivo, vosotros también viviréis.


En la casa de mi Padre hay lugar para todos. Si no fuera cierto, no os habría dicho que voy allí a prepararos un lugar.


¿Qué quiere decir con eso de que: «Me buscaréis, pero no me encontraréis, porque no podéis ir donde yo voy?».


Yo os quiero como a hijos, pero mientras no lleguéis a ser como Cristo, me haréis sufrir mucho, tanto como sufre una madre con dolores de parto.


Hijos míos, os escribo esta carta, para que no pequéis. Pero si alguno peca, tenemos a alguien que nos defiende ante Dios Padre: Jesucristo, el Justo,


Hijos míos, vosotros sois de Dios y habéis vencido a esos falsos profetas, pues él permanece unido a vosotros y es más poderoso que su Enemigo.


Cuidado, hijos míos; no adoréis a los dioses falsos.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí