Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Jeremías 45:3 - Biblia Lenguaje Básico

3 Tú, Baruc, siempre estás quejándote. Dices que eres muy infeliz y que yo solo te hago sufrir cada vez más. También dices que ya estás cansado de sufrir y que no logras descansar.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

3 Tú dijiste: ¡Ay de mí ahora!, porque ha añadido Jehová tristeza a mi dolor; fatigado estoy de gemir, y no he hallado descanso.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

3 “Tú has dicho: ‘¡Estoy repleto de dificultades! ¿No he sufrido ya lo suficiente? ¡Y ahora el Señor ha añadido más! Estoy agotado de tanto gemir y no encuentro descanso’”.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Ya que tú has dicho: 'Pobre de mí, porque Yavé añade más penas a mis sufrimientos, estoy cansado de tanto llorar sin encontrar consuelo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

3 Tú dijiste: ¡Ay de mí, porque YHVH ha añadido tristeza a mi dolor! ¡Estoy cansado de gemir, y no hallo descanso!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 A pesar de que has dicho: '¡Ay de mí! pues Yahveh añade pena a mi dolor; estoy agotado de tanto gemir y no encuentro reposo',

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 45:3
28 Tagairtí Cros  

—A pesar de todo lo dicho, y de lo amargo de mis quejas, Dios me sigue castigando.


¡Pobre de mí! ¡Soy un hombre sin patria que vive entre gente enemiga!


¡Pero yo espero seguir viviendo para disfrutar de tu bondad mientras aún estoy vivo!


Me siento muy angustiado, y no dejo de pensar en ti desde la región del río Jordán y desde los montes Hermón y Mizar.


En el mundo de los muertos nadie se acuerda de ti. Si dejas que me muera, ya no podré alabarte.


¡Estoy cansado de llorar! Por las noches lloro tanto que mis lágrimas empapan mi cama.


¡Siento que me hundo en el barro y no tengo dónde apoyar el pie! ¡Me encuentro en aguas profundas, luchando contra la corriente!


Quien se rinde ante un problema no demuestra fuerza ni carácter.


—El Dios todopoderoso te dice:


Estoy tan agobiado por el dolor que no me quedan ganas de vivir.


¡Quisiera huir al desierto y buscar allí un albergue para apartarme de mi pueblo, pues todos ellos son rebeldes, son una banda de traidores!


Intensa lluvia de fuego ha enviado Dios sobre mí abrasando todos mis huesos. Dios me puso una trampa, y me hizo retroceder. Me dejó en el abandono; mi sufrimiento no tiene fin.


No hay un solo pecado que él no haya cometido. Castiga, pues, su maldad como me castigaste a mí porque es mucho lo que he llorado y se me va a romper el corazón.


Nos hace sufrir y nos aflige, pero no disfruta con ello. Nos hiere, pero nos tiene compasión, porque su amor no tiene límites.


Dios es bueno y nos permite servirle. Por eso no nos desanimamos.


Por eso no nos desanimamos. Aunque nuestro cuerpo mortal se va desgastando, nuestro espíritu va cobrando más fuerza.


Así que no nos cansemos de hacer el bien porque, si no nos cansamos de hacerlo, Dios nos premiará a su debido tiempo.


En cuanto a vosotros, hermanos, no os canséis de hacer el bien.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí