Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Hechos 5:2 - Biblia Lenguaje Básico

2 pero se quedaron con parte del dinero de la venta. El resto se lo entregaron a los apóstoles.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

2 y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 y llevó solo una parte del dinero a los apóstoles pero afirmó que era la suma total de la venta. Con el consentimiento de su esposa, se quedó con el resto.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 pero se guardó una parte del dinero, siempre de acuerdo con su esposa; la otra parte la llevó y la entregó a los apóstoles.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

2 pero sustrajo parte° del precio, sabiéndolo también la mujer; y trayendo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 y, a sabiendas de ella, guardó parte de su precio y llevó y puso a los pies de los apóstoles sólo la otra parte.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 5:2
16 Tagairtí Cros  

¡Maldito sea el que me prometa uno de sus mejores animales y luego me presente un animal defectuoso! ¡Yo soy el gran Rey y todas las naciones me respetan!». Así os lo aseguro yo mismo que soy el Dios todopoderoso.


Todo lo hacen para que la gente los vea y los admire. Por eso escriben frases de las Escrituras y las guardan en cajitas de cuero o se las atan en la frente y en los brazos. Cada vez hacen más grandes esas cajitas y ponen a su ropa flecos más anchos que los demás.


Entonces Jesús le dijo a Judas: —¡Déjala tranquila! Ella estaba guardando ese perfume para el día de mi entierro. En cuanto a los pobres, siempre los tendréis cerca de vosotros, pero a mí no siempre me tendréis. En realidad, a Judas no le importaban los pobres; dijo eso porque era un ladrón y, como él era el encargado de cuidar el dinero de Jesús y de los discípulos, a veces se quedaba con parte de ese dinero.


Los seguidores de Jesús vivían unidos y compartían unos con otros lo que tenían.


Bernabé vendió un terreno suyo, y todo el dinero que sacó de la venta se lo entregó a los apóstoles.


Algo muy diferente pasó con un hombre llamado Ananías. Este hombre se puso de acuerdo con su mujer, que se llamaba Safira, y vendieron un terreno de su propiedad,


Entonces Pedro dijo a Ananías: —¿Por qué le has hecho caso a Satanás y te has quedado con parte del dinero, creyendo que podrías engañar al Espíritu Santo?


Entonces Pedro le preguntó: —Dime, ¿vendisteis el terreno por este precio? —Así es —respondió ella—. Ese fue el precio. Entonces Pedro le dijo:


y no hagáis nada por orgullo o por rivalidad. Al contrario, haced todo con humildad y considerad a los demás mejores que vosotros mismos.


Porque todos los males comienzan cuando solo se piensa en el dinero. Por el deseo de amontonarlo, muchos se han apartado de la fe y han acabado teniendo muchos problemas y sufrimientos.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí