Génesis 31:5 - Biblia Lenguaje Básico

^5-7 Allí les dijo: —He notado que vuestro padre ya no me trata como antes. Sabéis bien que yo he puesto todo mi empeño en servirle. Sin embargo, él siempre me ha hecho trampa y varias veces me cambió el sueldo. Pero Dios no le permitió hacerme daño alguno.

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Biblia Reina Valera 1960

⁵ y les dijo: Veo que el semblante de vuestro padre no es para conmigo como era antes; mas el Dios de mi padre ha estado conmigo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵ y les dijo: —Noto un cambio en la actitud de su padre hacia mí, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵ y les dijo: 'Veo que el padre de ustedes no me mira con buenos ojos como antes, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵ y les dijo: Estoy observando que el semblante de vuestro padre para conmigo no es como en días anteriores, pero el Dios de mi padre ha estado conmigo.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵ y les dijo: 'Veo que la actitud de vuestro padre hacia mí no es la misma de antes; pero el Dios de mi padre está conmigo.

Génesis 31:5 Tagairtí Cros

Génesis 21:22

Por esos días, Abimélec fue a visitar a Abrahán. Lo acompañó Picol, que era el capitán de su ejército. Al llegar, Abimélec dijo a Abrahán: —He visto que Dios te ayuda en todo lo que haces.

Génesis 26:24

Esa misma noche Dios se le apareció y le dijo: —Yo soy el Dios de tu padre Abrahán, y por él te voy a bendecir y aumentaré el número de tus descendientes. No tengas miedo, pues yo estoy contigo, te ayudaré en todo.

Génesis 28:13

Y vio también que Dios estaba de pie en la parte más alta de la escalera, y le decía: —Yo soy el Dios de Abrahán y de Isaac. A ti y a tus descendientes les daré la tierra donde ahora estás acostado.

Génesis 28:15

Yo estaré contigo y no te abandonaré hasta cumplir lo que te he prometido. Te cuidaré por dondequiera que vayas y te haré volver a esta tierra.

Génesis 31:13

Yo soy el Dios que se te apareció en Betel, donde derramaste aceite sobre una piedra y me hiciste una promesa. Márchate de aquí, sal de este país y regresa a Canaán, que es donde tú naciste».

Génesis 31:29

Ganas y poder no me faltan de haceros daño, pero anoche el Dios de tu padre me ordenó que no te reprochara nada.

Génesis 31:4

Jacob mandó llamar a Raquel y a Lía para que fueran a verlo al campo donde estaba cuidando sus ovejas.

Génesis 31:42

Menos mal que el Dios de mi abuelo Abrahán y el de mi padre Isaac me ayudó! Me vio cansado y afligido, y anoche salió en mi defensa delante de ti. Si no lo hubiera hecho, tú me habrías despedido sin nada.

Génesis 31:53

Pongo ante nosotros, como juez, al Dios de Abrahán y Najor. Así lo juró Jacob en el nombre del Dios que su padre Isaac adoraba;

Génesis 32:9

Luego Jacob hizo esta oración: —Dios mío, tú eres el Dios de mi abuelo Abrahán y de mi padre Isaac. Tú me ordenaste regresar a mi tierra, con mis parientes, y me prometiste tu ayuda.

Génesis 48:15

Entonces bendijo a José con estas palabras: —El Dios de mi abuelo Abrahán y de mi padre Isaac me ha guiado toda mi vida.

Isaías 41:10

Por tanto, no tengáis miedo, pues yo soy vuestro Dios y estoy a vuestro lado. Mi mano victoriosa os dará fuerza y ayuda; mi mano victoriosa siempre os dará su apoyo.

Hebreos 13:5

No viváis preocupados por tener más dinero. Estad contentos con lo que tenéis, porque Dios ha dicho en la Escritura: «Nunca te abandonaré».