Dios me dijo: —Isaías, quiero que llames al sacerdote Urías y a Zacarías, hijo de Baraquías, para que sean testigos de lo que vas a hacer. Delante de ellos tomarás una tablilla grande de arcilla y escribirás, con letras grandes y claras, el nombre Maher Salal, Jas Baz, que significa «Ya viene la destrucción, ya están aquí los ladrones».