14 Este monstruo engañó a la gente por medio de los milagros que hizo con el poder que el primer monstruo le había dado. Luego les obligó a hacer una estatua del primer monstruo, el cual había sido herido con una espada, pero se había recuperado de la herida.
14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.
14 Con los milagros que se le permitió hacer en nombre de la primera bestia, engañó a todos los que pertenecen a este mundo. Les ordenó que hicieran una gran estatua de la primera bestia, la que estaba herida de muerte y después volvió a la vida.
14 Por medio de estos prodigios que le ha sido concedido obrar al servicio de la bestia, engaña a los habitantes de la tierra y los persuade a que hagan una estatua en honor de la bestia que, después de ser herida por la espada, se había recuperado.
14 y engaña a los que moran en la tierra por medio de las señales que le fue concedido hacer en presencia de la bestia, ordenando a los que moran en la tierra hacer una imagen a la bestia que tiene la herida de la espada, y revivió.°
14 Seduce, con los prodigios que le permitieron hacer al servicio de la bestia, a los moradores de la tierra, diciéndoles que hagan una imagen en honor de la bestia que, a pesar de la herida de la espada, sobrevivió.
Isaías regresó junto al rey y le comunicó lo que Dios le había dicho. Ezequías le preguntó: —¿Y cómo voy a saber que sanaré y que podré ir al Templo dentro de tres días? ¿Qué señal me vas a dar de parte de Dios? Isaías le respondió: —Dime tú qué señal prefieres que te dé Dios como prueba de que su palabra se cumplirá: ¿quieres que la sombra en el reloj del sol se adelante diez grados o prefieres que retroceda? Ezequías contestó: —Que la sombra se adelante es fácil. Lo difícil es que retroceda. Prefiero que retroceda diez grados. Isaías rogó a Dios que lo hiciera así, y Dios hizo que la sombra retrocediera diez grados en el reloj de Ajaz. Luego Isaías ordenó preparar una pasta de higos secos, se la pusieran a Ezequías sobre la parte enferma y el rey sanó.
y te concederé que mueras y seas enterrado en paz en la tumba de tus antepasados, sin que tengas que ver el castigo que voy a descargar sobre el pueblo». Los mensajeros fueron a contarle al rey lo que Dios había respondido por medio de la profetisa Juldá.
Dios le preguntó cómo lo haría y el espíritu le respondió: «Haré que todos los profetas del rey solo digan mentiras». Entonces Dios le dijo: «Vete porque he decidido que logres convencer a Ajab». Así pues, Dios ha permitido que todos tus profetas solo te digan mentiras, porque ha decidido que te vaya mal en la batalla.
Pero si algún profeta se deja seducir y os da un mensaje falso, es que yo mismo, el Dios de Israel, así lo ha permitido. Sin embargo, castigaré a ese profeta y lo eliminaré del pueblo;
En cuanto entré, pude ver toda clase de reptiles y de animales odiosos, pintados sobre la pared. También estaban pintados todos los odiosos ídolos de los israelitas.
El rey del norte hará todo lo que quiera. Será tanto su orgullo que se creerá superior a todos los dioses. Hasta llegará a ofender gravemente al verdadero Dios. Y todo le saldrá bien, pero solo hasta que Dios lo castigue, porque lo que Dios tiene decidido lo cumplirá.
El gran dragón fue arrojado del cielo. El dragón es Satanás, el diablo. Y es la antigua serpiente que se dedica a engañar a todo el mundo. Él y sus ángeles fueron lanzados a la tierra.
Entonces vi que del mar salía un monstruo con diez cuernos y siete cabezas. En cada cuerno tenía una corona y en cada cabeza tenía escritos nombres que ofendían a Dios.
Dios permitió que el segundo monstruo diera vida a la estatua del primer monstruo de modo que pudiera hablar. Y le dio también poder para dar muerte a todos los que no adorasen la estatua del primer monstruo.
A ese monstruo lo adorarán todos los habitantes de la tierra, menos los que tienen sus nombres escritos en el libro de la vida del Cordero que fue sacrificado, un libro escrito desde antes de que Dios creara el mundo.
El humo del fuego que lo atormentará nunca dejará de subir; ni de día ni de noche habrá descanso para los que adoran al monstruo y a su estatua y se han dejado poner la marca de su nombre.
Luego los seguía un tercer ángel, que decía con fuerte voz: —Si alguno adora al monstruo o a su estatua o deja que le pongan su marca en la frente o en la mano,
Vi también algo que parecía un mar de cristal mezclado con fuego. Junto a ese mar estaban de pie los que habían vencido al monstruo, los que no habían adorado a su estatua ni estaban marcados con el número de su nombre. Dios les había dado arpas
El primer ángel fue y vació su copa sobre la tierra, y a todos los que tenían la marca del monstruo y adoraban su estatua les salió una llaga terrible y dolorosa.
¡Nunca más brillará en ti la luz de una lámpara, ni se oirán canciones de boda! Tus comerciantes llegaron a ser los más poderosos del mundo y tú engañaste con tus brujerías a gente de todos los países.
Pero el monstruo fue capturado junto con el falso profeta que en su presencia había hecho maravillas. El falso profeta era el que había engañado con milagros a los que se dejaron poner la marca del monstruo y adoraron su estatua. Los dos fueron lanzados vivos a un lago ardiente de fuego y azufre.
No tengas miedo de lo que vas a sufrir. El diablo meterá a algunos de vosotros en la cárcel para poneros a prueba. Pero vuestro sufrimiento durará poco tiempo y, si me sois fieles hasta la muerte, os daré como premio la vida eterna.
Y el diablo, que los había engañado, será arrojado al lago donde el azufre arde en llamas. Allí serán también arrojados el monstruo y el falso profeta, y allí serán atormentados todos ellos para siempre, de día y de noche.
Todos los habitantes de la tierra tendrán dificultades y sufrimientos. Pero a ti te protegeré, porque tú has sido fiel cuando te pedí que no dejaras de creer en mí.