2 Timoteo 4:1 - Biblia Lenguaje Básico1 Cuando Jesucristo venga como Rey, juzgará a todos, tanto a los que estén vivos como a los que estén muertos. Por eso pongo a Dios y a Jesucristo por testigos de lo que te mando. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19601 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente1 En presencia de Dios y de Cristo Jesús —quien un día juzgará a los vivos y a los muertos cuando venga para establecer su reino— te pido encarecidamente: Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)1 Te ruego delante de Dios y de Cristo Jesús, juez de vivos y muertos, que ha de venir y reinar, y te digo: Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion1 Requiérote solemnemente en presencia de Dios y de Jesús el Mesías, destinado a juzgar a los vivos y a los muertos en su aparición y en su reino: Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19751 Te conjuro, en presencia de Dios y de Cristo Jesús, que ha de juzgar a vivos y a muertos, en nombre de su venida y de su reino: Féach an chaibidil |
Después de eso, el malvado aparecerá y Satanás lo ayudará a engañar a muchos con señales y falsos milagros. Engañará con toda clase de mentiras a los que no quisieron amar y aceptar el verdadero mensaje de Jesucristo; mensaje que podría haberlos salvado del castigo que recibirán. Dios permitirá que ese hombre mentiroso y malvado los engañe, para que acepten lo que es falso. Así Dios castigará a todos los que no han querido creer en el verdadero mensaje y disfrutan haciendo el mal. Pero cuando el Señor Jesús vuelva con todo su poder y su gloria, destruirá con el soplo de su boca al hombre malvado y le quitará su poder.
La fe que tenéis en Dios es como el oro: igual que la calidad del oro se pone a prueba con el fuego, la fe que tenéis en Dios se pone a prueba con los problemas. Si pasáis la prueba, vuestra fe será más valiosa que el oro, pues el oro, aunque haya superado la prueba del fuego, se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la fe que tenéis en Dios, porque una fe que ha pasado por tantas pruebas merece ser alabada.