2 Reyes 22:7 - Biblia Lenguaje Básico

⁷ Como los encargados de la construcción son gente honesta, no tienen que dar cuenta de ese dinero.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

⁷ y que no se les tome cuenta del dinero cuyo manejo se les confiare, porque ellos proceden con honradez.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ pero no les exijas a los supervisores de la construcción que lleven cuenta del dinero que reciben, porque son hombres honestos y dignos de confianza».

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ Pero no se les pida cuentas del dinero que se les entregue porque son gente honrada'.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ y que no se les pida cuenta de la plata que ponen en su mano, porque obran con fidelidad.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ Pero que no se les pida cuentas del dinero que se entregue en sus manos, porque actúan con honradez'.

2 Reyes 22:7 Tagairtí Cros

2 Reyes 22:6

maestros de obra, a los albañiles y a los carpinteros. Con ese dinero también podrán comprar la madera y las piedras que se necesitan para reparar el Templo.

2 Crónicas 24:14

Cuando terminaron, devolvieron al rey y a Joyadá el dinero que había sobrado. Con él hicieron utensilios de oro y plata para utilizarlos en el culto del Templo. Y así, mientras Joyadá vivió, se ofrecieron continuamente en el Templo sacrificios en honor de Dios.

Nehemías 7:2

A mi hermano Jananí lo nombré gobernador de Jerusalén; a Jananías lo nombré comandante de la fortaleza de Jerusalén, porque mi confianza en su lealtad era total y además respetaba a Dios más que otras personas.

Proverbios 28:20

La persona digna de confianza siempre será alabada; la que solo quiere hacerse rica no quedará sin castigo.

1 Corintios 4:2

A los que están encargados de alguna tarea se les pide que la hagan con fidelidad.

2 Timoteo 2:2

Tú has oído lo que les he enseñado a muchas personas. Ahora quiero que enseñes eso mismo a cristianos en los que puedas confiar y que sean capaces de enseñar a otros.

3 Juan 1:5

Querido hermano, te portas como verdadero cristiano cuando ayudas a los otros seguidores de Cristo, especialmente a los que llegan de otros lugares.