2 Crónicas 17:1 - Biblia Lenguaje Básico1-9 Le sucedió como rey su hijo Josafat. Dios ayudó a Josafat porque siguió el ejemplo de su antepasado David. Josafat no adoró a las imágenes del dios Baal; además quitó de todo el territorio de Judá los santuarios locales de las colinas, que se utilizaban para adorar ídolos, y destruyó las imágenes de la diosa Astarté. Josafat obedeció a Dios, al igual que su padre, pues no siguió el ejemplo de los reyes de Israel. Al contrario, cuando ya llevaba tres años, envió a los oficiales más importantes de su reino a enseñar la ley de Dios a todo el pueblo. Y ellos así lo hicieron: recorrieron todas las ciudades de Judá enseñando al pueblo y llevando consigo el libro de la Ley. Estos son los nombres de los oficiales que envió el rey: Benjáil, Abdías, Zacarías, Natanael y Miqueas. Con ellos iban los sacerdotes Elisamá y Jorán, a quienes acompañaban los siguientes levitas: Semaías, Netanías, Zebadías, Asael, Semiramot, Jonatán, Adonías, Tobías y Tobadonías. Por todo ello, Dios hizo que Josafat mantuviera bajo control a todo su reino y pudiera fortificar sus ciudades para resistir cualquier ataque de Israel. El rey puso jefes del ejército y tropas en todo el territorio de Judá, en sus ciudades fortificadas y en las ciudades que su padre Asá había conquistado en el territorio de Efraín. Además, toda la gente de Judá le hacía regalos. Por eso Josafat llegó a ser muy rico y querido. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19601 Reinó en su lugar Josafat su hijo, el cual se hizo fuerte contra Israel. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente1 Luego Josafat, hijo de Asa, lo sucedió en el trono, y fortaleció a Judá para hacerle frente a cualquier ataque de Israel. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)1 En su lugar reinó su hijo Josafat, el cual se fortificó contra Israel. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion1 Y reinó en su lugar su hijo Josafat, y se fortaleció contra Israel. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19751 Reinó en su lugar su hijo Josafat, quien se hizo fuerte contra Israel. Féach an chaibidil |
Estos son los jefes de los mejores soldados que tuvo David, los que le apoyaron durante su reinado y que, junto con el resto de los israelitas, lo nombraron rey, tal como Dios lo había anunciado: Jasobán, hijo de Jacmoní, que fue el principal de los tres soldados más valientes que tuvo David y que en cierta ocasión mató con su lanza a trescientos hombres. Después de él, Eleazar, hijo de Dodó, el ajojita.
Cuando Roboán consolidó y afianzó su reino, él y todo el pueblo de Israel dejaron de obedecer la ley de Dios. Por esa razón, cuando Roboán llevaba cinco años reinando, Dios permitió que Sisac, rey de Egipto, atacara Jerusalén. Sisac tenía un ejército de mil doscientos carros de combate y sesenta mil jinetes; además, venían con él soldados libios, suquitas y etíopes, en tal cantidad que no se podían contar. El faraón fue conquistando, una tras otra, las ciudades y fortalezas de Judá, y finalmente llegó hasta Jerusalén. Los principales jefes de Judá se habían reunido allí con Roboán ante el ataque de Sisac, y fue entonces cuando el profeta Semaías les dijo: —Esto es lo que os dice Dios: «Puesto que vosotros os olvidasteis de mí, ahora yo os abandono a vosotros y os dejo bajo el poder de Sisac». Entonces los jefes y el rey reconocieron con humildad su maldad y confesaron: «¡El castigo de Dios es justo!». Cuando Dios vio que habían reconocido con humildad su pecado, les mandó este nuevo mensaje por medio de Semaías: —Como habéis sido humildes, no dejaré que Sisac destruya Jerusalén, sino que en breve tiempo os liberaré de su poder. Sin embargo, para que comprobéis la diferencia que hay entre servirme a mí, o a los reyes de este mundo, por algún tiempo estaréis sometidos al rey de Egipto.