Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





2 Corintios 9:1 - Biblia Lenguaje Básico

1 En realidad, no hace falta que os siga escribiendo acerca de la ayuda enviada a los cristianos en la región de Judea.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

1 Cuanto a la ministración para los santos, es por demás que yo os escriba;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 En realidad, no necesito escribirles acerca del ministerio de ofrendar para los creyentes de Jerusalén.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

1 En cuanto a la ayuda a los santos, a nuestros hermanos, no es necesario que se la recomiende,

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

1 Porque en cuanto a la contribución para los santos, es por demás que os escriba;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 En cuanto a este servicio en favor de los fieles, no hace falta que os escriba;

Féach an chaibidil Cóip




2 Corintios 9:1
18 Tagairtí Cros  

Cuando Rebeca supo lo que andaba planeando Esaú, mandó llamar a Jacob y le dijo: —Tu hermano Esaú solo espera el momento de matarte.


Pero decid también de mi parte al rey de Judá que os ha enviado a consultarme:


No podemos ir a su encuentro; su justicia y rectitud no tienen límite; su poder es enorme.


Poema compuesto por la familia de Coré. Canto de amor. Instrucciones para el director del coro: este poema deberá cantarse con la melodía titulada «Los lirios».


Y en cuanto a si los muertos van a resucitar, podéis leer en las Escrituras lo que Dios dijo a Moisés:


Durante muchos años he andado por otros países. Luego volví a mi país para traer dinero a los pobres y presentar una ofrenda a Dios.


Por ahora, Dios actúa con los judíos como si fueran sus enemigos. Pero lo hace solo para daros a vosotros la oportunidad de creer en la buena noticia. Dios sigue amando a los judíos, pues eligió a sus antepasados para formar su pueblo.


Compartid lo que tengáis con los creyentes. Recibid en vuestros hogares a los que vengan de otras ciudades y países.


Pedidle que en la región de Judea me proteja de los que no creen en él, y que el dinero que llevo a los hermanos de Jerusalén sea bien recibido.


La única condición que nos pusieron fue que no dejáramos de ayudar a los pobres de la iglesia en Jerusalén. Y eso es precisamente lo que he procurado hacer con todo empeño.


Siempre que nos sea posible, hagamos el bien a todos, pero especialmente a los que forman la familia de la fe.


Hermanos míos, no hace falta que os escriba acerca del momento exacto en que todo esto ocurrirá.


Pero vosotros tenéis al Espíritu Santo, que habéis recibido de Cristo y no necesitáis que nadie os enseñe, pues el Espíritu de Dios os enseña todo ya que de él procede la verdad y no la mentira. Por eso, seguid las enseñanzas del Espíritu Santo y manteneos siempre unidos a Cristo.


Dios es testigo de que nos hemos hecho esta promesa.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí