Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





1 Samuel 1:15 - Biblia Lenguaje Básico

15-16 Pero Ana le respondió: —Señor mío, no pienses que estoy borracha. No he bebido vino ni alcohol. Estoy muy triste, y por eso estoy aquí suplicando a Dios que me responda.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

15 Y Ana le respondió diciendo: No, señor mío; yo soy una mujer atribulada de espíritu; no he bebido vino ni sidra, sino que he derramado mi alma delante de Jehová.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

15 —¡Oh no, señor! —respondió ella—. No he bebido vino ni nada más fuerte. Pero como estoy muy desanimada, derramaba ante el Señor lo que hay en mi corazón.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

15 Ana le respondió: 'Señor, yo sólo soy una mujer que tiene pena; no he tomado vino ni bebida alcohólica, sino que estaba expandiendo mi corazón delante de Yavé.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

15 Pero Ana respondió y dijo: No, señor mío; yo soy una mujer de espíritu afligido; no he bebido vino ni licor fuerte, sino que derramo mi alma en presencia de YHVH.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 Le respondió Ana: 'No, mi señor; soy una mujer con el alma llena de pena. No he bebido vino ni licores, sino que estoy desahogando mi alma ante Yahveh.

Féach an chaibidil Cóip




1 Samuel 1:15
12 Tagairtí Cros  

Ya la vida se me escapa; la aflicción se ha apoderado de mí.


Hacia ti extiendo mis manos, pues te necesito igual que la tierra seca necesita el agua.


Día y noche me he bebido mis lágrimas; mis enemigos no dejan de decirme: «¿Cómo es que tu Dios te ha abandonado?».


Dios es mi salvador; Dios es mi motivo de orgullo; él es quien me llena de fuerza. ¡Dios es mi refugio!


Los que formáis su pueblo, confiad siempre en Dios. Contadle todos vuestros problemas, pues Dios es nuestro refugio.


Solo uno mismo conoce su propia amargura, con ningún extraño comparte su alegría.


La respuesta amable calma el enfado; la respuesta grosera lo enciende más.


La paciencia hace que ceda el gobernante, una palabra amable vence toda resistencia.


Alza la voz y ruega a Dios por la vida de tus niños, que por falta de comida caen muertos por las calles. Clama a Dios por la noche, cuéntale cómo te sientes.


Los israelitas se reunieron en Mispá y reconociendo que habían ofendido a Dios sacaron agua de los pozos, la derramaron como señal de arrepentimiento delante de Dios y después ayunaron. Fue en Mispá donde Samuel comenzó a gobernar a los israelitas.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí