Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





1 Corintios 15:37 - Biblia Lenguaje Básico

37 lo que se siembra es una simple semilla de trigo o de alguna otra cosa, algo muy distinto de la planta que va a nacer.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

37 Y lo que siembras no es el cuerpo que ha de salir, sino el grano desnudo, ya sea de trigo o de otro grano;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

37 y lo que pones en el suelo no es la planta que crecerá sino tan solo una simple semilla de trigo o de lo que estés sembrando.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

37 Y lo que tú siembras no es el cuerpo de la futura planta, sino un grano desnudo, ya sea de trigo o de cualquier otra semilla.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

37 Y lo que siembras: No siembras el cuerpo que llegará a ser, sino un grano desnudo, de trigo o de algún otro;

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

37 Y al sembrar, no siembras el cuerpo que luego ha de ser, sino un simple grano, por ejemplo, de trigo o de cualquier otra cosa;

Féach an chaibidil Cóip




1 Corintios 15:37
5 Tagairtí Cros  

Si el cadáver de alguno de ellos cae sobre la semilla que se va a sembrar, la semilla seguirá siendo pura.


No importa si está dormido o despierto, o si es de noche o de día; la semilla nace y va creciendo sin que el sembrador entienda cómo.


¡Qué preguntas más tontas! Para que una planta crezca, primero tiene que morir la semilla que fue sembrada;


A cada semilla Dios le da el cuerpo que él quiere darle.


Doy gracias a Dios porque nos hace participar del triunfo de Cristo, y porque nos permite anunciar por todas partes su mensaje para que así todos lo reconozcan. Anunciar la buena noticia es como ir dejando por todas partes el suave aroma de un perfume. Y nosotros somos ese suave aroma que Cristo ofrece a Dios. Somos como un perfume que da vida a los que creen en Cristo. Por el contrario, para los que no creen somos como un olor mortal. ¿Quién será capaz de cumplir con la tarea que Dios nos ha dejado?


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí