Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Oseas 5:6 - Biblia Version Moderna (1929)

6 Con sus rebaños y con sus vacadas irán a buscar a Jehová, mas no le podrán hallar; él se ha retirado ya de ellos.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

6 Con sus ovejas y con sus vacas andarán buscando a Jehová, y no le hallarán; se apartó de ellos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Cuando vengan con sus manadas y rebaños para ofrecer sacrificios al Señor, no lo encontrarán, porque él se ha apartado de ellos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Con sus ovejas y sus bueyes irán en busca de Yavé, pero no lo encontrarán porque se ha alejado de ellos.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Irán en busca de YHVH Con sus rebaños y sus vacadas, Pero no lo podrán hallar, Porque Él se apartó de ellos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Con sus ovejas y sus vacas irán en busca de Yahveh, pero no lo encontrarán: se apartó de ellos.

Féach an chaibidil Cóip




Oseas 5:6
23 Tagairtí Cros  

A lo que respondió Moisés: Con nuestros jóvenes y con nuestros ancianos iremos; con nuestros hijos y con nuestras hijas, con nuestros rebaños y con nuestras vacadas iremos; porque hemos de celebrar una fiesta solemne a Jehová.


¡entonces mis despreciadores clamarán a mí, mas yo no responderé, me buscarán con empeño, pero no me hallará!


El sacrificio de los inicuos es abominación a Jehová; mas la oración de los rectos es su deleite.


El sacrificio de los inicuos es una abominación; ¡cuánto más si lo presentan para encubrir la maldad


Abrí a mi amado: ¡pero mi amado ya se había retirado, había seguido adelante! ¡Yo había perdido el juicio, cuando él me habló! Busquéle, mas no le hallé; llaméle, mas no me respondió.


El que degüella un toro, es como el que mata a un hombre; el que sacrifica una oveja, como el que corta la cabeza a un perro; el que hace ofrenda vegetal, como quien presenta sangre de cerdo; el que quema incienso, como el que bendice a un ídolo: sí, ellos han escogido sus propios caminos, y sus almas se complacen en sus abominaciones.


Por tanto así dice Jehová: He aquí que traigo sobre ellos un mal del cual no podrán evadirse; y clamarán a mí, pero no les escucharé.


Por tanto, no ores tú por este pueblo, ni eleves por ellos clamor y oración; porque no les escucharé al tiempo que clamen a mí a causa de su calamidad.


Aunque ayunen, no oiré su clamor; y aunque ofrezcan holocaustos y ofrendas vegetales, no los aceptaré; sino que con espada, y con hambre, y con peste, haré exterminio en ellos.


No confiéis en las palabras mentirosas, de aquellos que dicen: ¡El Templo de Jehová, el Templo de Jehová, el Templo de Jehová son estos edificios!


Te has cubierto de una nube, para que no penetre nuestra oración.


Por tanto yo también me portaré con ellos en ira ardiente; no perdonará mi ojo, ni tendré piedad; y ellos clamarán en mis oídos con voz grande, mas no los oiré.


Entonces él me dijo: Hijo del hombre, ¿has visto lo que ellos están haciendo? Grandes son las abominaciones que la casa de Israel aquí hace, a fin de que yo me aleje de mi Santuario. Pero vuélvete aún, y verás abominaciones más grandes que éstas.


En cuanto a los sacrificios que me presentan, es que ellos mismos degüellan carne y se la comen; porque Jehová no tiene complacencia en ellos; ahora pues él se acordará de su iniquidad y castigará su pecado: ¡se volverán a Egipto!


Y andarán vagando de mar a mar, y desde el norte hasta el oriente correrán de acá para allá, en busca de alguna palabra de Jehová; mas no la hallarán.


Entonces clamarán a Jehová, mas no les responderá; y en ese tiempo esconderá él de ellos su rostro según han maleado sus obras.


¡Oh si hubiere entre vosotros quien cerrase las puertas del Templo, para que no encendierais fuego sobre mi altar en balde! ¡No tengo complacencia en vosotros, dice Jehová de los Ejércitos, ni aceptaré de vuestras manos ofrenda!


Mas él, mientras tanto, salía a los desiertos, y oraba.


Me buscaréis, y no me hallaréis; y donde yo estoy vosotros no podéis venir.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí