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Mateo 13:8 - Biblia Version Moderna (1929)

8 Mas parte cayó en tierra buena, y dio fruto; cual de a ciento por uno, cual de a sesenta, y cual de a treinta.

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Biblia Reina Valera 1960

8 Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 pero otras semillas cayeron en tierra fértil, ¡y produjeron una cosecha que fue treinta, sesenta y hasta cien veces más numerosa de lo que se había sembrado!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Otros granos, finalmente, cayeron en buena tierra y produjeron cosecha, unos el ciento, otros el sesenta y otros el treinta por uno.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 Pero otras cayeron en tierra buena, y dieron fruto: una, ciertamente a ciento por uno,° otra a sesenta, y otra a treinta por uno.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Otra parte cayó en tierra buena y dio fruto: una al ciento por uno, otra al sesenta, otra al treinta.

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Mateo 13:8
11 Tagairtí Cros  

Y sembró Isaac en aquella. tierra, y recogió aquel año ciento por uno; porque le bendijo Jehová.


Pero el que fué sembrado en tierra buena, es aquel que oye y entiende la palabra, el que también da fruto, y lleva cual de a ciento por uno, cual de a sesenta, y cual de a treinta.


Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.


Y éstos son los que son sembrados en la tierra buena: los que oyen la palabra, y la aceptan; y dan fruto, a treinta por uno, a sesenta, y a ciento.


Mas otra parte cayó en tierra buena, y subiendo y creciendo, dio fruto; y llevó, uno a treinta por uno, otro a sesenta, y otro a ciento.


Mas la que cayó en tierra buena, son los que con corazón leal y bueno, habiendo oído la palabra, la retienen, y llevan fruto con paciencia.


Y otra parte cayó entierra buena; y creciendo, llevó fruto a ciento por uno. Al decir estas cosas, clamó: ¡El que tiene oídos para oír, oiga!


En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto; y así seréis discípulos míos.


Porque yo sé que no habita en mí, es decir, en mi carne, cosa buena: pues está presente conmigo el querer, (mas no el obrar lo que es bueno).


estando llenos de los frutos de justicia, que son por medio de Jesucristo, para gloría y loor de Dios.


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