Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Marcos 9:7 - Biblia Version Moderna (1929)

7 Vino entonces una nube que les hacía sombra; y salió una voz de la nube que decía: Éste es mi amado Hijo; oídle a él.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

7 Entonces vino una nube que les hizo sombra, y desde la nube una voz que decía: Este es mi Hijo amado; a él oíd.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Luego una nube los cubrió y, desde la nube, una voz dijo: «Este es mi Hijo muy amado. Escúchenlo a él».

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

7 En eso se formó una nube que los cubrió con su sombra, y desde la nube llegaron estas palabras: 'Este es mi Hijo, el Amado, escúchenlo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

7 Y apareció una nube que los cubría, y de la nube salió una voz: Éste es mi Hijo amado.° ¡A Él oíd!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Se formó entonces una nube que los envolvió, y de la nube salió una voz: 'Éste es mi Hijo amado; escuchadle'.

Féach an chaibidil Cóip




Marcos 9:7
41 Tagairtí Cros  

Anunciaré el decreto: Jehová me dijo: Mi Hijo eres tú, yo te he engendrado hoy.


Nubes y tinieblas están al rededor de él; justicia y juicio son el asiento de su trono.


Y la gloria de Jehová hizo mansión sobre el monte Sinaí; y la nube lo cubrió por seis días. Y al séptimo día Dios llamó a Moisés de en medio de la nube.


¶Entonces la nube cubrió el Tabernáculo de Reunión, y la gloria de Jehová llenó la Habitación.


¶Estaba mirando en visiones de la noche, y he aquí que sobre las nubes del cielo venía Uno parecido a un hijo de hombre; y vino al Anciano de días, y le trajeron delante de él.


Confió en Dios; líbrele ahora, si le quiere; porque ha dicho:  De Dios soy Hijo.


El centurión, pues, y los que con él hacían la guardia de Jesús, viendo el terremoto y las cosas que sucedieron, temieron en gran manera, diciendo: ¡Verdaderamente Hijo de Dios era éste!


Y he aquí una voz procedente de los cielos que decía:  Este es mi amado Hijo, en quien tengo mi complacencia.


Y vino una voz de los cielos, que decía: Tú eres mi amado Hijo; en ti hallo mi complacencia.


porque no sabía lo que debía decir; pues estaban sobrecogidos de temor.


Y repentinamente, mirando ellos en derredor ya no vieron más a nadie, sino a Jesús solo.


y descendió sobre él el Espíritu Santo en forma corporal, como paloma; y hubo una voz, procedente del cielo , que decía:  Tú eres mi Hijo amado; en ti hallo mi complacencia.


Y yo lo he visto, y he dado testimonio que éste es el Hijo de Dios.


Natanael le respondió: ¡Rabbí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel!


¡Padre, glorifica tu nombre! Entonces vino una voz del cielo, que decía: Ya lo he glorificado, y otra vez lo glorificaré.


Los judíos le respondieron: Nosotros tenemos una ley, y conforme a nuestra ley él debe morir; por cuanto se ha hecho Hijo de Dios.


éstas empero han sido escritas, para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios; y para que, creyendo, tengáis vida en su nombre.


A causa de esto los judíos procuraban con mayor empeño matarle; porque no solamente quebrantaba el sábado, sino que también llamaba a Dios su propio Padre, haciéndose igual a Dios.


El Padre también que me envió, él mismo ha dado testimonio de mí. Vosotros nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su apariencia.


y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo!


¶Jesús oyó decir que le habían echado fuera, y hallándole, le dijo: ¿Crées tú en el Hijo de Dios?


Y habiendo dicho estas cosas, viéndole ellos, se fué elevando; y le recibió una nube, ocultándole de su vista.


Éste es aquel Moisés que dijo a los hijos de Israel: El Señor vuestro Dios os levantará un Profeta, de entre vuestros hermanos, semejante a mí: a él oiréis.


Y prosiguiendo el camino, llegaron a cierta agua; y dijo el eunuco: ¡He aquí agua! ¿qué estorba, para que yo no sea bautizado?


que fué declarado ser Hijo de Dios, con poder, según el espíritu de santidad, por su resurrección de entre los muertos,)


POR lo cual debemos dar más solícita atención a las cosas que hemos oído, no sea que acaso, como vasos rajados, las dejemos escurrir.


porque recibió de parte de Dios Padre honra y gloria, cuando una voz descendió a él desde la magnífica gloria, diciendo: Éste es mi amado Hijo, en quien tengo mi complacencia.


Sabemos empero que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento, para que conozcamos a aquel que es verdadero; y nosotros estamos en el que es verdadero, es decir, en su Hijo Jesucristo.  Éste es el verdadero Dios y la vida eterna.


He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá; y también aquellos que le traspasaron; y todas las tribus de la tierra plañirán a causa de él.  Así sea. Amén.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí