Levítico 26:31 - Biblia Version Moderna (1929)31 Y reduciré vuestras ciudades a soledad, y haré solitarios vuestros santuarios, y no me será grato el olor de vuestros sacrificios. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196031 Haré desiertas vuestras ciudades, y asolaré vuestros santuarios, y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente31 Haré que sus ciudades queden desoladas y destruiré sus lugares de culto pagano. No me agradaré de sus ofrendas, las cuales deberían ser un aroma agradable para mí. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)31 Reduciré a escombros sus ciudades y devastaré sus santuarios, no me agradará más el perfume de sus sacrificios. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion31 Pondré vuestras ciudades en ruina, destruiré vuestros santuarios y no oleré más el aroma aplacador de vuestros sacrificios. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197531 Convertiré vuestras ciudades en montones de ruinas, derribaré vuestros santuarios y no aspiraré ya más vuestros aromas calmantes. Féach an chaibidil |
por cuanto fué tierno tu corazón, y te humillaste delante de Jehová, cuando oíste lo que yo he pronunciado contra este lugar, y contra sus habitantes, a saber, que vendrían a ser un asombro y una maldición; y has rasgado tus vestidos, y has llorado delante de mí; por lo mismo te he oído, dice Jehová.
El que degüella un toro, es como el que mata a un hombre; el que sacrifica una oveja, como el que corta la cabeza a un perro; el que hace ofrenda vegetal, como quien presenta sangre de cerdo; el que quema incienso, como el que bendice a un ídolo: sí, ellos han escogido sus propios caminos, y sus almas se complacen en sus abominaciones.
En todos los lugares de vuestra habitación, las ciudades serán asoladas, y los altos serán hechos una desolación; a fin de que vuestros altares sean asolados, y vengan a ser una desolación, y sean quebrados y se acaben vuestros ídolos, y sean cortadas vuestras imágenes del sol, y sean extirpadas vuestras hechuras.