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Jeremías 23:10 - Biblia Version Moderna (1929)

10 Porque la tierra está atestada de adúlteros, y porque a causa de juramentos falsos se enluta la tierra: están secados los pastos del desierto; puesto que la carrera de estas gentes es hacia el mal, y su valentía consiste en hacer lo que no es recto.

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Biblia Reina Valera 1960

10 Porque la tierra está llena de adúlteros; a causa de la maldición la tierra está desierta; los pastizales del desierto se secaron; la carrera de ellos fue mala, y su valentía no es recta.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

10 Pues la tierra está llena de adulterio, y está bajo una maldición. La tierra está de luto; los pastos del desierto están resecos. Todos hacen lo malo y abusan del poder que tienen.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

10 El país está repleto de adúlteros; y porque los he maldecido, el país está de duelo y se han secado los oasis del desierto. Corren para hacer el mal y se empeñan en actuar injustamente.

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La Biblia Textual 3a Edicion

10 La tierra está llena de adulterios, A causa de falsos° juramentos la tierra está de luto: Los pastos del desierto se han secado, Porque la carrera° de ellos es mala, Y su poder un abuso.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Porque el país está lleno de adúlteros, porque a causa de la maldición el país está triste, se han secado los oasis del desierto. Corren hacia el mal y su poder es injusto.

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Jeremías 23:10
27 Tagairtí Cros  

¶Y se hallaron de los hijos de los sacerdotes que habían tomado mujeres extranjeras, algunos de los hijos de Jesúa hijo de Josadac, y de los hermanos de él, Maasías, y Eliezer, y Jarib, y Gedelías;


la tierra fructífera en salados, por la maldad de los que en ella habitan.


Por tanto la maldición ha devorado la tierra, y los que habitan en ella son culpables: por tanto son abrasados los habitantes de la tierra, y pocos hombres son dejados en ella.


¡Ay de aquellos que arrastran la iniquidad con cuerdas de vanidad, y el pecado como con coyundas de carreta;


Sí, la han convertido en una desolación; se me queja a mí siendo desolada: desolada está toda la tierra; por cuanto no hay hombre que reflexione en su corazón.


¡Judá está cubierto de luto, sus puertas languidecen, sus hijos, vestidos de negro, se sientan en tierra; y el grito de Jerusalem sube al cielo!


Porque desde el menor hasta el mayor de ellos, cada uno es dado a ganancias injustas; y desde el profeta hasta el sacerdote, cada uno practica el engaño.


Pues qué, ¿hurtáis, matáis y cometéis adulterio, juráis en falso también, y quemáis incienso a Baal, y andáis tras otros dioses que no conocéis;


A causa de las montañas alzaré lloro y llanto, y por los pastos del desierto, lamentación; porque están quemados, de modo que ninguno pasa por ellos, ni se oye la voz de ganado: desde las aves del cielo hasta las bestias, todo ha huído, se ha ido.


¿Quién es el hombre sabio que entienda esto? ¿y quién es aquel a quién ha hablado la boca de Jehová, para que lo declare? ¿Por qué causa ha perecido la tierra? ¿por qué está abrasada como el desierto, de modo que ninguno pasa por ella?


Ojalá tuviera en el desierto un albergue de viandantes; para que dejase a mi pueblo, para que me alejase de ellos: pues que todos son adúlteros, una asamblea de hombres desleales.


Todos ellos son adúlteros; son como horno calentado por el panadero: deja éste de atizar la lumbre, después de hacer la masa, hasta que ésta fermente.


¡El campo está asolado, la tierra está enlutada; porque asolado está el trigo; el mosto se ha secado, languidece el aceite!


Y CUANDO alguno pecare en esto: porque habiendo oído la voz de la imprecación, siendo él testigo respecto de algo que hubiere visto o que supiere, y con todo no lo manifestare, él llevará su iniquidad;


Sus profetas son disolutos, hombres de perfidia; sus sacerdotes profanan el Santuario; hacen violencia a la ley.


Y yo me acercaré a vosotros para juicio; y seré veloz testigo contra los hechiceros, y contra los adúlteros, y contra los que juran en falso, y contra los que defraudan al jornalero de su salario, y oprimen a la viuda y al huérfano, y apartan al extranjero de su derecho; y no me temen a mí, dice Jehová de los Ejércitos.


para los fornicarios, para los sodomitas, para los que hurtan a hombres, para los mentirosos, para los perjuros, y para cualquiera otra cosa que haya contraria a la sana doctrina;


¶Honroso sea el matrimonio entre todos, y sea el lecho conyugal sin mancilla; porque a los fornicarios de una parte, y a los adúlteros de otra, Dios los juzgará.


¡Almas adúlteras! ¿no sabéis acaso que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Aquel pues que quisiere ser amigo del mundo, se hace enemigo de Dios.


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