Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Hechos 9:8 - Biblia Version Moderna (1929)

8 Levantóse pues Saulo de la tierra; y cuando abrió los ojos, no veía nada; y llevándole de la mano, le condujeron a Damasco.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

8 Entonces Saulo se levantó de tierra, y abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole por la mano, le metieron en Damasco,

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Saulo se levantó del suelo, pero cuando abrió los ojos, estaba ciego. Entonces sus acompañantes lo llevaron de la mano hasta Damasco.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 y Saulo, al levantarse del suelo, no veía nada por más que abría los ojos. Lo tomaron de la mano y lo llevaron a Damasco.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Entonces Saulo se levantó del suelo, y abriendo sus ojos, nada° veía. Así que, llevándolo de la mano, lo introdujeron en Damasco.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Se levantó, pues, Saulo del suelo y aunque tenía los ojos abiertos nada veía; lo llevaron, pues, de la mano, hasta Damasco.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 9:8
10 Tagairtí Cros  

Y se repartieron contra ellos de noche, él y sus siervos, e hiriéronlos y los persiguió hasta Hoba, que está a la izquierda de Damasco.


Y a los hombres que estaban a la puerta de la casa los hirieron con ceguera, desde el menor hasta el mayor: y ellos se cansaban buscando inútilmente la puerta.


A lo cual le dijo Jehová: ¿Quién dió boca al hombre? ¿o quién le hace mudo o sordo, dotado de vista o ciego? ¿acaso no soy yo, Jehová?


Ahora pues, he aquí que la mano del Señor está sobre ti, y estarás, ciego, sin ver el sol por algún tiempo. E inmediatamente cayeron sobre él obscuridad y tinieblas; y andaba en derredor buscando quien le llevase de la mano.


Y como yo no podía ver, a causa de la gloria de aquella luz, conducido de la mano por los que conmigo estaban, vine a Damasco.


Y al momento cayeron de sus ojos unas como escamas, y recobró la vista: y levantándose, fué bautizado;


Y estuvo tres días privado de la vista; y no comió ni bebió.


En Damasco, el gobernador bajo el rey Aretas, tenía guardada la ciudad de los damascenos, para prenderme;


ni subí a Jerusalem, a verme con los que eran apóstoles antes que yo; sino que me fuí a la Arabia; y volví otra vez a Damasco.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí