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Hebreos 13:21 - Biblia Version Moderna (1929)

21 os perfeccione en toda obra buena, para que hagáis su voluntad obrando en vosotros lo que sea acepto delante de él, por medio de Jesucristo a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

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Biblia Reina Valera 1960

21 os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

21 los capacite con todo lo que necesiten para hacer su voluntad. Que él produzca en ustedes, mediante el poder de Jesucristo, todo lo bueno que a él le agrada. ¡A él sea toda la gloria por siempre y para siempre! Amén.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

21 que les haga adquirir todo lo que es perfecto, para que así cumplan su voluntad, pues él pone en nosotros lo que le agrada, por Cristo Jesús, a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén

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La Biblia Textual 3a Edicion

21 os perfeccione en todo° lo bueno para que hagáis su voluntad, haciendo en nosotros° lo que es agradable delante de Él por medio de Jesús el Mesías, a quien sea la gloria por los siglos, amén.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

21 os capacite con toda clase de bienes para cumplir su voluntad, realizando en nosotros lo que él quiere por medio de Jesucristo, a quien sea rendida gloria por los siglos de los siglos. Amén.

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Hebreos 13:21
53 Tagairtí Cros  

También en Judá estuvo la mano de Dios para darles un solo corazón, para que cumpliesen el mandato del rey y de los príncipes, por orden de Jehová.


Jehová completará por mí lo que ha comenzado. ¡Oh Jehová, tu misericordia es para siempre; no desampares la obra de tus manos!


Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, éste es mi hermano, y hermana, y madre.


¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre? Dicen ellos: El primero. Jesús les dice:  En verdad os digo, que los publicanos y las rameras os van delante al reino de Dios.


enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado:  y he aquí que estoy yo con vosotros siempre, hasta la consumación delsiglo.


Y no nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal.  Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, para siempre.  Amén.


¶No todo aquel que me dice: ¡Señor! ¡Señor! entrará en el reino de los cielos; sino el que hace la voluntad de me Padre que está en los cielos.


yo en ellos, y tú en mí, para que ellos sean hechos perfectos en la unidad; para que conozca el mundo que tú me enviaste, y que los has amado a ellos, así como me has amado a mí.


Si alguno quisiere hacer su voluntad, conocerá de mi enseñanza, si es de Dios, o si hablo de parte de mí mismo.


Porque de él, y por medio de él, y para él son todas las cosas. A él sea la gloria para siempre. Amén.


al solo sabio Dios sea la gloria, por medio de Jesucristo, para siempre jamás. Amén.


Y puede Dios hacer que toda gracia abunde en vosotros; a fin de que, teniendo siempre toda suficiencia en todo, tengáis abundancia para toda buena obra;


a quien sea la gloria para siempre jamás. Amén.


Porque hechura suya somos nosotros, creados en Cristo Jesús para las buenas obras, las cuales había Dios antes preparado, para que anduviésemos en ellas.


porque por medio de él ambos a dos tenemos libre la entrada, en virtud de un mismo Espíritu, al Padre.


Él es la Roca; perfecta es su obra; porque todos sus caminos son justicia: Dios de verdad y sin iniquidad, él es justo y recto.


estando llenos de los frutos de justicia, que son por medio de Jesucristo, para gloría y loor de Dios.


y toda lengua confiese que Jesucristo es SEÑOR para gloria de Dios Padre.


porque Dios es el que obra en vosotros, así el querer como el obrar a causa de su buena voluntad.


Todo lo puedo, en aquel que me fortalece.


Ahora empero lo tengo todo en abundancia: lleno estoy, habiendo recibido, por conducto de Epafrodito, las cosas enviadas de vuestra parte; ofrenda de olor grato, sacrificio acepto, muy agradable a Dios.


Y todo cuanto hiciereis, en palabra o en obra, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.


Hijos, obedeced a vuestros padres en todo; porque esto es muy acepto en el Señor.


Os saluda Epafras, que es uno de vosotros, siervo de Cristo, el cual se esfuerza siempre a favor vuestro, en sus oraciones, para que estéis firmes, siendo perfectos, y plenamente asegurados en toda la voluntad de Dios.


a fin de fortalecer vuestros corazones, de modo que sean irreprensibles en santidad, delante de nuestro Dios y Padre, en la venida de nuestro Señor Jesús con todos sus santos.


Porque ésta es la voluntad de Dios, es a saber, vuestra santificación: que os abstengáis de la fornicación;


¶Y el mismo Dios de paz os santifique del todo; y ruego que vuestro ser entero, espíritu y alma y cuerpo, sea guardado y presentado irreprensible en el advenimiento de nuestro Señor Jesucristo.


consuele vuestros corazones, y os haga estables en toda obra y palabra buena.


¡Y al rey de los siglos, inmortal, invisible, al solo verdadero Dios, sea honra y gloria para siempre jamás! Amén.


teniendo buen testimonio en cuanto a buenas obras: si hubiere criado hijos, si hubiere hospedado a los extranjeros, si hubiere lavado los pies de los santos, si hubiere socorrido a los afligidos, si hubiere seguido estrictamente toda buena obra.


el cual solo tiene inmortalidad, habitando en una luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto jamás, ni le puede ver: a quien sea honra y poder eterno. Amén.


a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, estando bien preparado para toda buena obra.


Asimismo me librará el Señor de toda obra mala, y me llevará con seguridad a su reino celestial; a él sea la gloria, por los siglos de los siglos. Amén.


Porque tenéis necesidad de la paciencia, a fin de que, habiendo hecho la voluntad de Dios, recibáis la promesa.


a la asamblea general e iglesia de los primogénitos que están inscritos en el cielo, y  Dios el juez de todos, y a los espíritus de los justos, hechos ya perfectos,


Por lo cual, recibiendo nosotros un reino que no puede ser movido, tengamos gracia, por medio de la cual sirvamos a Dios, de un modo que le sea acepto, con reverencia y temor filial:


Mas del bien hacer, y de la comunicación de beneficios, no os olvidéis; porque en los tales sacrificios Dios se complace mucho.


vosotros también, como piedras vivas, sois edificados en un templo espiritual, para que seáis un sacerdocio santo; a fin de ofrecer sacrificios espirituales, aceptos a Dios, por medio de Jesucristo.


a fin de que ya no viváis más tiempo en la carne para las concupiscencias de los hombres, sino según la voluntad de Dios.


Antes bien, creced en la gracia, y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea la gloria, tanto ahora como en el día de la eternidad. Amén.


Y el mundo se va pasando, con su concupiscencia; mas el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.


y cuanto pedimos, recibimos de él; porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables a su vista.


al único Dios, Salvador nuestro, sea la gloria, la majestad, el dominio y el poder, ahora y para siempre jamás.  Amén.


Y delante del trono había un mar de vidrio, parecido al cristal; y en medio, delante del trono, y alrededor del trono, había cuatro seres vivientes, llenos de ojos, delante y detrás.


Y a toda cosa creada que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y sobre el mar, y a todas las cosas que hay en ellos, las oí decir: ¡Bendición, y honra y gloria y dominio al que está sentado sobre el trono, y al Cordero, por los siglos de los siglos! ¡Amén!


Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: ¡Digno eres tú de tomar el libro, y de abrir sus sellos; porque fuiste inmolado, y has adquirido para Dios con tu misma sangre, hombres de toda tribu, y lengua, y pueblo, y nación;


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