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Hebreos 1:2 - Biblia Version Moderna (1929)

2 en estos postreros días, nos ha hablado a nosotros por su Hijo; a quien ha constituído heredero de todas las cosas, por medio de quien también hizo el universo.

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Biblia Reina Valera 1960

2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Y ahora, en estos últimos días, nos ha hablado por medio de su Hijo. Dios le prometió todo al Hijo como herencia y, mediante el Hijo, creó el universo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 hasta que en estos días, que son los últimos, nos habló a nosotros por medio del Hijo, a quien hizo destinatario de todo, ya que por él dispuso las edades del mundo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 en estos postreros días nos habló por medio del Hijo, a quien constituyó heredero de todas las cosas, por el cual también hizo el universo;

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 En estos últimos días nos ha hablado por medio del Hijo, al que nombró heredero de todas las cosas, y por medio del cual creó también los mundos y los tiempos.

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Hebreos 1:2
70 Tagairtí Cros  

ENTONCES llamó Jacob a sus hijos, y dijo: Juntaos, y os haré conocer las cosas que os han de suceder en los días venideros:


Y acontecerá que en los postreros días, el monte de la Casa de Jehová será establecido como cabeza de los demás montes, y será ensalzado sobre los collados; y como ríos, fluirán a él todas las naciones.


Así dice Jehová, tu Redentor, y el que te formó desde el seno materno: Yo soy Jehová; Creador de todas las cosas, el que da expansión a los cielos por sí solo, el que extiende la tierra, sin que haya nadie conmigo;


Yo hice la tierra, y creé al hombre sobre ella; yo, sí, mis mismas manos extendieron los cielos; y doy mis órdenes a toda la hueste de ellos,


Porque así dice Jehová, Creador de los cielos (él solo es Dios), el que formó la tierra y la hizo, el cual la estableció;(no en vano la creó, sino que para ser habitada la formó): ¡Yo soy Jehová, y no hay otro Dios!


No tornará el ardor de la ira de Jehová hasta que haya cumplido y hasta que haya establecido los propósitos de su corazón: en los tiempos venideros entenderéis esto.


Empero haré tornar el cautiverio de Moab en los postreros días, dice Jehová. Hasta aquí es la carga de Moab.


Y subirás contra mi pueblo Israel como una nube que cubre la tierra; en los postreros días ha de ser esto; y yo te haré subir contra mi tierra, para que las naciones me conozcan, cuando me haga santificar en ti, oh Gog, delante de sus mismos ojos.


Vengo pues para hacerte saber lo que ha de suceder a tu pueblo en los tiempos venideros; porque la visión se refiere a tiempos remotos aún.


hay empero un Dios en el cielo que revela los secretos, el cual hace conocer al rey Nabucodonosor lo que ha de ser en los tiempos venideros. Tu sueño, y las visiones de tu cabeza sobre tu cama, eran estos:


Después de esto volverán los hijos  de Israel, y buscarán a Jehová su Dios y a David su rey; y acudirán temblorosos a Jehová y a su benevolencia en los postreros días.


MAS sucederá que en los postreros días el monte de la Casa de Jehová será establecido como cabeza de los demás montes, y será ensalzado sobre los collados; ¡y, como ríos, fluirán a él los pueblos!


Y ahora, he aquí, ya me voy a mi pueblo; ven pues, que te avisaré lo que este pueblo hará a tu pueblo en los días venideros.


el enemigo que la sembró es el diablo; la siega es la consumación del siglo y los segadores son los ángeles.


Todavía hablaba él, cuando, he aquí, una nube de luz que les cubrió; y he aquí una voz salía de la nube que decía: ¡Éste es mi amado Hijo, en quien tengo mi complacencia! ¡oídle a él!


Pero cuando los labradores vieron al hijo, dijeron entre sí:  Éste es el heredero; ¡venid, matémosle, y tomemos su herencia!


Mas Jesús callaba.  Y el sumo sacerdote le dijo:  ¡Te conjuro por el Dios vivo, que nos digas, si eres tú el Cristo, el Hijo de Dios!


Acercándose entonces Jesús, les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y sobre la tierra.


Y he aquí una voz procedente de los cielos que decía:  Este es mi amado Hijo, en quien tengo mi complacencia.


PRINCIPIO del evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.


Teniendo aún uno, su amado hijo, a éste les envió, el postrero, diciendo: Tendrán respeto a mi hijo.


Mas aquellos labradores dijeron entre sí: ¡Éste es el heredero! ¡venid, matémosle; y será nuestra la herencia!


En el mundo estaba, y el mundo fué hecho por medio de él, y el mundo no le conoció.


¶Y el Verbo fué hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su glorila, gloria como del Unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.


Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él ni una sola cosa de lo que ha sido hecho fué hecha.


conociendo Jesús que el Padre había entregado todas las cosas en sus manos, y que había venido de Dios, y estaba para ir a Dios,


Dios también le glorificará en sí mismo, y le glorificará luego.


Ya no os llamo siervos; porque el siervo no sabe lo que hace su señor: mas os he llamado amigos; porque todo cuanto he oído de parte de mi Padre, os lo he dado a conocer.


Todo cuanto tiene el Padre, mío es; por tanto os dije que tomará de lo mío y os lo anunciará.


según le has dado poder sobre toda carne, para que a todos aquellos que le has dado, les dé vida eterna.


Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dió a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en él, no perezca, mas tenga vida eterna.


Suscitóse entonces una cuestión por parte de los discípulos de Juan, con un judío, acerca de la purificación:


Pues como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo que tenga vida en sí mismo;


y le ha dado potestad de ejecutar juicio, por cuanto él es Hijo del hombre.


Sabemos que Dios habló a Moisés; pero en cuanto a éste, no sabemos de dónde sea.


La palabra que él envió a los hijos de Israel, predicando el evangelio de paz por medio de Jesucristo (el cual es Señor de todos),


Y sucederá que, en los postreros   días, dice Dios,   derramaré de mi Espíritu sobre   toda carne:   y profetizarán vuestros hijos y   vuestras hijas;    y vuestros jóvenes verán visiones,   y vuestros ancianos soñarán sueños.


que fué declarado ser Hijo de Dios, con poder, según el espíritu de santidad, por su resurrección de entre los muertos,)


y si hijos, luego herederos; herederos de Dios, y coherederos con Cristo, si es así que sufrimos con él, para que también seamos glorificados con él.


mas hablamos la sabiduría de Dios en misterio; es decir, sabiduría que ha estado encubierta, la cual predestinó Dios, antes de los siglos, para gloria nuestra;


para nosotros empero hay un solo Dios, el Padre, procedente de quien son todas las cosas, y nosotros para él; y un solo Señor, Jesucristo, por medio de quien son todas las cosas, y nosotros por medio de él.


Mas cuando vino la plenitud del tiempo, envió Dios a su Hijo, hecho de mujer, hecho bajo ley,


(con relación a la administración del cumplimiento de los tiempos,) de resumir todas las cosas en Cristo, así las que están en el cielo, como las que están sobre la tierra; en él, digo,


y hacer que todos los hombres vean cuál sea la administración del misterio, que por todos los siglos ha estado encubierto en Dios, creador de todas las cosas;


¶Jehová tu Dios levantará para ti un Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, semejante a mí; a él oiréis:


Porque yo sé que después de mi muerte os corromperéis totalmente, y os apartaréis del camino que os he prescrito, y así os sobrevendrá el mal en los días venideros, cuando hayáis hecho lo que es malo a los ojos de Jehová, provocándole a ira con las obras de vuestras manos.


Cuando te vieres en angustia, y te sobrevinieren todas estas cosas en los días venideros, entonces te has de volver a Jehová tu Dios, y escucharás su voz;


Pues ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Tú eres mi Hijo; yo te he engendrado hoy? y otra vez: ¿Yo seré su Padre, y él será mi Hijo?


Del Hijo empero se dice así: ¡Tu trono, oh Dios, es por los siglos de los siglos; y un cetro de rectitud es el cetro de tu reino!


Por fe entendemos que los siglos han sido constituídos por la palabra de Dios, de manera que lo que se ve no fué hecho de cosas que aparecen.


¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? la cual, habiendo sido anunciada al principio por el Señor, nos ha sido confirmada por los que le oyeron a él;


mas Cristo lo era, como hijo, constituído sobre la casa del Señor; cuya casa somos nosotros, si retenemos firme el denuedo y el regocijo de nuestra esperanza, hasta el fin.


¶Teniendo pues un gran sumo sacerdote, que ha pasado al través de los cielos, Jesús, el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.


Aunque era Hijo, aprendió la obediencia por las cosas que padeció;


Porque la ley constituye sumos sacerdotes  a hombres sujetos  a enfermedad; pero la palabra del juramento, que es después de la ley, constituye al Hijo, el cual es ya hecho perfecto para siempre.


sin padre, sin madre, sin genealogía, no teniendo ni principio de días, ni fin de vida, mas hecho semejante al Hijo de Dios), este Melquisedec permanece sacerdote para siempre.


de otra suerte le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde la fundación del mundo: mas ahora, una sola vez en la consumación de los siglos, él ha sido manifestado para efectuar la destrucción del pecado, por medio del sacrificio de sí mismo.


conocido en verdad en la presciencia de Dios, antes de la fundación del mundo, pero manifestado al fin de los tiempos,


sabiendo esto primeramente: que en los postreros días vendrán escarnecedores, con sus escarnios, andando según sus mismas concupiscencias,


como os han dicho: En el postrer tiempo ha de haber escarnecedores, andando según sus mismas concupiscencias impías.


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