Génesis 34:8 - Biblia Version Moderna (1929)

⁸ Habló pues Hamor con ellos, diciendo: El alma de Siquem mi hijo está unida a vuestra hija; ruégoos se la deis por mujer;

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Biblia Reina Valera 1960

⁸ Y Hamor habló con ellos, diciendo: El alma de mi hijo Siquem se ha apegado a vuestra hija; os ruego que se la deis por mujer.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Hamor habló con Jacob y con sus hijos: —Mi hijo Siquem está verdaderamente enamorado de su hija —dijo—. Por favor, permítanle casarse con ella.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Hamor habló con ellos y les dijo: 'Siquem, mi hijo, está enamorado de la hermana de ustedes. Les ruego que se la den por esposa.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Pero Hamor habló con ellos, diciendo: El alma de mi hijo Siquem se ha apegado a vuestra hija, os ruego se la deis por mujer.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Jamor habló con ellos y les dijo: 'Siquén, mi hijo, se ha enamorado de vuestra hija; dádsela, os ruego, por esposa.

Génesis 34:8 Tagairtí Cros

Génesis 34:3

Y unióse su alma a Dina hija de Jacob, y amó á la joven, y habló cariñosamente a la joven.

Génesis 34:7

Y los hijos de Jacob vinieron del campo luego que lo supieron; y se resintieron los hombres, y enardecióse mucho su enojo, porque se había cometido villanía en Israel, acostándose con la hija de Jacob; cosa que no se debía hacer.

Génesis 34:9

Y emparentad con nosotros; nos daréis a nosotros vuestras hijas, y os daremos a vosotros nuestras hijas.

1 Reyes 11:2

de las naciones de que había dicho Jehová a los hijos de Israel: No habéis de llegaros a ellas, ni ellas se han de llegar a vosotros; porque indudablemente apartarán de mí vuestro corazón para seguir tras los dioses de ellas: con éstas pues Salomón se estrechó en lazos de amor.

Job 7:2

Como el esclavo suspira por la sombra, y como el jornalero espera el premio de su trabajo;

Salmos 119:20

Mi alma se quebranta con el anhelo que tiene por tus juicios en todo tiempo.

Salmos 63:1

¡OH Dios, Dios mío eres tú! ¡de madrugada te buscaré! ¡mi alma tiene sed de ti; mi carne suspira por ti, en tierra seca y sedienta, donde no hay aguas;

Salmos 84:2

¡Mi alma suspira y aun desfallece por los atrios de Jehová; mi corazón y mi carne claman por el Dios vivo!

Jeremías 22:27

Mas a la tierra adonde su alma anhela volver, ellos no volverán.