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Amós 9:4 - Biblia Version Moderna (1929)

4 y si fueren en cautiverio delante de sus enemigos, de allí mandaré la espada, la cual los matará: y fijaré mis ojos sobre ellos para mal, y no para bien.

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Biblia Reina Valera 1960

4 Y si fueren en cautiverio delante de sus enemigos, allí mandaré la espada, y los matará; y pondré sobre ellos mis ojos para mal, y no para bien.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Aunque sus enemigos los lleven al destierro, ordenaré a la espada que allí los mate. Estoy decidido a traerles desastre y no a ayudarlos».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

4 cuando vayan cautivos, arreados por sus enemigos, daré orden a la espada para que los degüelle. Tendré mis ojos puestos en ellos, no para ayudarlos sino para castigarlos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

4 Aunque vayan en cautiverio ante sus enemigos, Allí° mandaré a la espada que los matará. Tendré fijos mis ojos sobre ellos para el mal y no para el bien.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 aunque vayan al destierro delante de sus enemigos, allí mandaré la espada que los matará; pondré mis ojos en ellos para su ruina, no para su bien'.

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Amós 9:4
20 Tagairtí Cros  

Y tú dijiste a tus siervos: Traédmele, para que ponga mis ojos sobre él.


Porque los ojos de Jehová recorren toda la tierra, para que él se muestre fuerte en pro de aquellos cuyos corazones son perfectos para con él. Tú te has portado insensatamente en esto; de aquí pues en adelante tendrás guerras.


Clamaron los justos, y oyólos Jehová, y de todas sus angustias los sacó.


Mas aconteció, a la vela de la mañana, que dirigió Jehová una mirada hacia el ejército de los Egipcios, de en medio de la columna de fuego y de nube, y puso en consternación al ejército de los Egipcios.


Los asoladores han venido; se ven sobre todos los cerros pelados del desierto; porque la espada de Jehová devora desde el uno hasta el otro extremo  de la tierra: no hay paz para ninguna carne.


Porque he puesto mi rostro hacia esta ciudad para mal y no para bien, dice Jehová: será entregada en mano del rey de Babilonia, el cual la quemará a fuego.


pues pondré mis ojos sobre ellos para bien, y los haré volver a esta tierra, y los edificaré y no los derribaré; y los plantaré y no los desarraigaré.


Tómale, y mira por su seguridad, y no le hagas ningún daño, sino que conforme él mismo te dijere, así harás con él.


Anda, y habla con Ebed-melec etíope, diciendo: Así dice Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que voy a dar efecto a mis palabras acerca de esta ciudad, para mal y no para bien; y se cumplirán en aquel día a presencia tuya.


¶Por tanto, así dice Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que voy a poner mi rostro contra vosotros para mal, y para destruir a todo Judá.


Una tercera parte de ti morirá de peste, y será consumida de hambre en medio de ti; y otra tercera parte caerá a espada en derredor de ti; y otra tercera parte la esparciré a todos los vientos, y sacaré la espada en pos de ellos.


Una tercera parte consumirás a fuego en medio de la ciudad, cuando hayas cumplido los días del sitio; y tomarás otra tercera parte y la herirás en derredor con espada; y esparcirás otra tercera parte al viento; y yo sacaré espada en pos de ellos.


¶Asimismo respecto de cualquier hombre de la casa de Israel, o de los extranjeros que moran en medio de vosotros, que comiere cualquiera clase de sangre, yo pondré mi rostro contra aquella persona que comiere sangre, y la cortaré de en medio de su pueblo:


y a vosotros os esparciré entre las naciones,  y sacaré espada en pos de vosotros; y vuestra tierra será una desolación, y vuestras ciudades serán una soledad.


He aquí que los ojos de Jehová el Señor están sobre el reino pecador; y lo voy a destruir de sobre la faz de la tierra, sólo que no destruiré por completo a la casa de Jacob, dice Jehová.


Porque antes de aquellos días, no había alquiler para el hombre, ni había alquiler para la bestia; ni tampoco había paz, a causa del adversario, para quien salía o entraba; pues que yo puse a todos los hombres cada cual contra su prójimo.


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