2 Reyes 12:10 - Biblia Version Moderna (1929)10 Y sucedió que cuando veían que había mucho dinero en el arca, subía el secretario del rey, con el sumo sacerdote, y ataban en talegas, después de contado, el dinero que fué hallado en la Casa de Jehová. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196010 Y cuando veían que había mucho dinero en el arca, venía el secretario del rey y el sumo sacerdote, y contaban el dinero que hallaban en el templo de Jehová, y lo guardaban. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente10 Cada vez que el cofre se llenaba, el secretario de la corte y el sumo sacerdote contaban el dinero que la gente había traído al templo del Señor y después lo metían en bolsas. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)10 El sacerdote Yoyada tomó después una caja y mandó hacerle un hoyo en la tapa; la puso al lado del altar, a la derecha de la entrada a la casa de Yavé. Los sacerdotes que custodiaban la puerta de la Casa depositaban en ella todo el dinero que se traía a la casa de Yavé. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion10 Y fue así que cuando veían que había mucha plata en el cofre, el escriba del rey y el sumo sacerdote iban y contaban, y colocaban en bolsas° la plata que se hallaba en la Casa de YHVH. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197510 El sacerdote Joadá tomó un arca, abrió en la tapa un agujero y la colocó junto al altar, a la derecha, según se entra al templo de Yahveh. Y los sacerdotes encargados de la custodia del umbral echaban allí todo el dinero llevado al templo de Yahveh. Féach an chaibidil |
Entonces el rey mandó a Helcías sumo sacerdote, y a los sacerdotes de segundo orden y a los porteros, que sacasen del Templo de Jehová todos los utensilios hechos para el culto de Baal, y para la Ashera, y para todo el ejército del cielo; y los quemaron fuera de Jerusalem, en los campos del Cedrón; y llevaron sus cenizas a Bet-el.
Y fué así que a su tiempo el arca era llevada al despacho del rey, por mano de los levitas; y sucedía esto siempre que viesen que había allí mucho dinero: entonces venía el secretario del rey con el comisario del sumo sacerdote, y vaciaban el arca; luego la alzaban y la volvían a su lugar. Así lo hacían de día en día, y recogían dinero en abundancia.