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1 Reyes 13:24 - Biblia Version Moderna (1929)

24 y éste se fué; mas un león le halló en el camino, y le mató. Y quedó su cadáver tendido en el camino, y el asno estaba junto a él; el león también se estaba junto al cadáver.

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Biblia Reina Valera 1960

24 Y yéndose, le topó un león en el camino, y le mató; y su cuerpo estaba echado en el camino, y el asno junto a él, y el león también junto al cuerpo.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

24 y el hombre de Dios siguió su camino. Mientras viajaba, le salió al paso un león y lo mató. Su cuerpo quedó tirado en el camino, y tanto el burro como el león estaban junto al cadáver.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

24 y el hombre se fue. Un león lo atacó en el camino y lo mató. Su cadáver quedó en el camino, el burro no lo abandonó y el león se quedó también al lado del cuerpo.

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La Biblia Textual 3a Edicion

24 Pero yendo en el camino un león lo halló y lo mató. Y su cadáver quedó tendido en el camino, y el asno estaba parado junto a él, y el león también estaba parado junto al cadáver.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 Partió, y un león lo sorprendió en el camino y lo mató. Su cadáver quedó tendido en el camino. El asno permaneció junto a él, y también el león se quedó junto al cadáver.

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1 Reyes 13:24
9 Tagairtí Cros  

Aconteció pues, después que hubo comido pan, y después que hubo bebido, que el otro aparejó para él el asno, es decir, para el profeta que él había hecho volver:


Y él le dijo: Por cuanto no obedeciste la voz de Jehová, luego que te apartes de mí te herirá a ti un león. Y apartándose de él, le halló un león y le hirió.


Entonces volviéndose hacia atrás, los miró, y los maldijo en el nombre de Jehová: y salieron dos osas del bosque, que despedazaron de ellos cuarenta y dos muchachos.


Dice el perezoso: ¡Hay un león afuera! ¡seré muerto en las calles!


Dice el perezoso: ¡Hay un león rugiente en el camino! ¡hay un león en las calles


cual si un hombre huyera de un león, y diese con un oso; o si entrara en una casa, y apoyara la mano en la pared, y le mordiese una culebra.


pero me vió el asna y desvióse de mi presencia estas tres veces. Si ella no se hubiera desviado de mi presencia, cierto que yo te hubiera matado, y a ella dejara con vida.


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