Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Zacarías 2:4 - Biblia Martin Nieto

4 Y pregunté: ¿Qué vienen a hacer éstos aquí? Y me contestó: Aquellos cuernos son los que subyugaron a Judá, de tal manera que nadie levantó su cabeza; estos herreros vinieron a hacerles temblar de espanto, a derribar los cuernos de las gentes que levantaron su poder contra la tierra de Judá para dispersarla'.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

4 y le dijo: Corre, habla a este joven, diciendo: Sin muros será habitada Jerusalén, a causa de la multitud de hombres y de ganado en medio de ella.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 El otro ángel dijo: —Apresúrate y dile a ese joven: “¡Jerusalén algún día estará tan llena de gente y de animales que no habrá lugar suficiente para todos! Muchos vivirán fuera de las murallas de la ciudad.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Yo dije: '¿Qué vienen a hacer aquellos hombres?', y él me explicó: 'Esos cuernos son las naciones que han dispersado a Judá, sin que nadie pudiera resistirles. Pero éstos han venido para aterrorizarlos, para acabar con el poderío de las naciones que han lanzado sus fuerzas contra el país de Judá para dispersar a su gente.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

4 diciéndole: Corre, habla a aquel joven, y dile: Por la multitud de personas y de ganado que habrá en ella, Jerusalem será una ciudad abierta.°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Yo pregunté: '¿Qué vienen a hacer éstos?'. Contestó: 'Aquéllos son los cuernos que dispersaron a Judá, de modo que nadie levantó ya cabeza; pero éstos vienen para espantarlos, para derribar los cuernos de las naciones que alzaron los cuernos contra el país de Judá para dispersarlo'.

Féach an chaibidil Cóip




Zacarías 2:4
24 Tagairtí Cros  

Por eso los judíos de las provincias celebran el catorce del mes de adar como día de banquete y alegría, y se intercambian regalos.


Contempla a Sión, la ciudad de nuestras fiestas; tus ojos verán a Jerusalén, como mansión segura, tienda que no se arranca; no se moverán jamás sus estacas, ni se romperá ninguna de sus cuerdas.


el que confirma la palabra de sus servidores y cumple el consejo de sus enviados; el que dice a Jerusalén: Serás habitada, y a las ciudades de Judá: Seréis reconstruidas; yo realzaré sus ruinas;


De nuevo te dirán al oído tus hijos, que creías perdidos: Este lugar es muy estrecho para mí, hazme sitio donde pueda habitar.


Pues yo he creado al herrero, que sopla el fuego de las brasas, y con su trabajo las armas produce; mas también al destructor para aniquilarlas.


Yo dije: '¡Ah, Señor Dios, mira que yo no sé hablar; soy joven!'.


En esta tierra habitarán Judá y todas sus ciudades, los labradores y los pastores.


Vienen días -dice el Señor- en que yo sembraré en la casa de Israel y en la casa de Judá simiente de hombres y simiente de animales.


Como las innumerables estrellas de los cielos y las incontables arenas del mar, así multiplicaré yo la descendencia de mi siervo David y la de los levitas, mis ministros'.


Dirás: Voy a subir contra un país sin defensa; caeré sobre sus gentes pacíficas, que viven seguras y habitan todas sin defensas de muros, cerrojos y puertas.


Dios concedió a aquellos cuatro jóvenes ciencia e inteligencia en materia de escritura y en sabiduría. Daniel, en particular, sabía interpretar toda clase de visiones y sueños.


sin defecto alguno, de buen parecer, expertos en todos los campos del saber, inteligentes y aptos para servir en el palacio real. Ordenó también que se les enseñase la escritura y el idioma de los caldeos.


Ya llega el día en que serán reedificados tus muros; aquel día serán dilatadas tus fronteras.


Por tanto, esto dice el Señor: Me compadezco de nuevo de Jerusalén; mi casa será edificada en ella, palabra del Señor todopoderoso, y la plomada será tendida sobre Jerusalén.


Grita de nuevo y di: Esto dice el Señor todopoderoso: De nuevo abundarán en bienes mis ciudades; el Señor se compadecerá nuevamente de Sión y elegirá a Jerusalén'.


En aquel día yo haré de los jefes de Judá como una olla puesta sobre fuego de leña y como hachas encendidas en un manojo; ellos devorarán a derecha y a izquierda a todos los pueblos de alrededor, y Jerusalén será de nuevo habitada en su lugar.


Ésta será la plaga con la que el Señor castigará a todos los pueblos que lucharon contra Jerusalén: se les pudrirán sus carnes estando aún en pie, sus ojos se pudrirán en sus órbitas, su lengua se pudrirá en su boca.


Que nadie te menosprecie por ser joven; debes ser, más bien, ejemplo para los creyentes, en el modo de hablar, en el comportamiento, en el amor, en la fe, en la honestidad.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí