Zacarías 1:4 - Biblia Martin Nieto4 No seáis como vuestros padres, a quienes predicaron los profetas del pasado. Esto dice el Señor todopoderoso: Convertíos de vuestra mala conducta y de vuestras malas acciones. Pero no les escucharon ni me hicieron caso a mí, palabra del Señor. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 19604 No seáis como vuestros padres, a los cuales clamaron los primeros profetas, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras; y no atendieron, ni me escucharon, dice Jehová. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente4 No sean como sus antepasados que no querían escuchar ni prestar atención cuando los antiguos profetas les dijeron: ‘El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: “Apártense de sus malos caminos y abandonen todas sus prácticas malvadas”’. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)4 No se porten como sus antepasados, a quienes los antiguos profetas les gritaban: 'Déjense de andar por malos caminos y no sigan haciendo maldades. Pero ellos no quisieron escucharlos, ni les hicieron caso. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion4 No seáis como vuestros padres, a quienes clamaron los primeros profetas, diciendo: Así dice YHVH Sebaot: Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras. Pero no escucharon, ni me atendieron, dice YHVH. Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 19754 No seáis como vuestros padres, a quienes los antiguos profetas anunciaron: 'Así dice Yahveh Sebaot: convertíos de vuestros malos caminos y de vuestras males acciones'. Pero ellos no escucharon ni me hicieron caso -oráculo de Yahveh-. Féach an chaibidil |
'Id y consultad al Señor por mí y por todos los supervivientes en Israel y en Judá acerca de las palabras de este libro que se ha encontrado, pues la cólera del Señor se ha encendido contra nosotros, porque nuestros padres no hicieron caso de las palabras de este libro, cumpliendo lo que está escrito en él'.
Habla, pues, ahora a las gentes de Judá y a los habitantes de Jerusalén de esta manera: 'Esto dice el Señor: Mirad, yo estoy preparando contra vosotros una desgracia y madurando un proyecto en daño vuestro. Arrepentíos cada uno de vuestra mala conducta, mejorad vuestra conducta, vuestra manera de actuar'.
Os he mandado repetidamente, sin cansarme, a mis siervos los profetas para avisaros: Convertíos cada uno de su perverso camino, enmendad vuestra conducta, no vayáis tras dioses extraños, no los adoréis, y de esta forma podréis vivir en la tierra que yo os di a vosotros y a vuestros padres. Pero no habéis obedecido ni me habéis hecho caso.