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Salmos 84:9 - Biblia Martin Nieto

9 Señor, Dios omnipotente, escucha mi plegaria; atiéndeme, oh Dios de Jacob;

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Biblia Reina Valera 1960

9 Mira, oh Dios, escudo nuestro, Y pon los ojos en el rostro de tu ungido.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 ¡Oh Dios, mira con favor al rey, nuestro escudo! Muestra bondad a quien has ungido.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Mira, oh Dios, nuestro escudo, contempla la cara de tu ungido.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Ve, oh ’Elohim, escudo nuestro, Y mira el rostro de tu ungido.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Señor, Dios de los ejércitos, escucha mi plegaria, presta atención, Dios de Jacob. Selah

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Salmos 84:9
16 Tagairtí Cros  

Después de todo esto, la palabra del Señor fue dirigida a Abrán en una visión. Dijo: 'No temas, Abrán, yo soy tu escudo. Tu recompensa será muy grande'.


Éstas son las últimas palabras de David: 'Oráculo de David, hijo de Jesé; oráculo del hombre enaltecido, del ungido del Dios de Jacob, del cantor de los cánticos de Israel.


Señor Dios, no apartes tu mirada de tu ungido. Recuerda los favores que hiciste a tu siervo David'.


Aquí suscitaré a David un vástago y prepararé una lámpara para mi consagrado.


Se levantan los reyes de la tierra, los príncipes conspiran contra el Señor y su mesías:


'Ya tengo yo a mi rey entronizado sobre Sión, mi monte santo'.


cuántos los que dicen de mi vida: 'Ya ni Dios lo salva'.


mi Dios viene a mi encuentro con su amor, me hará ver la derrota de mis enemigos.


Un día en tus atrios vale más que mil: prefiero estar en el umbral de la casa de mi Dios a vivir en la casa del malvado.


Antaño apareciste y hablaste así a tus fieles: 'He prestado mi ayuda a un valiente, he exaltado a un elegido de mi pueblo;


Así ha sido. En esta ciudad, Herodes y Poncio Pilato se confabularon con los paganos y gentes de Israel contra tu santo siervo Jesús, tu mesías,


¡Dichoso tú, Israel! / ¿Quién como tú, pueblo vencedor? / Dios es el escudo que te protege, / la espada en marcha / que te conduce al triunfo. / Te adularán tus enemigos / para corromperte, / pero tú aplastarás su orgullo'.


Cuando llegaron y vio a Eliab, se dijo: 'Seguramente que el Señor tiene delante a su ungido'.


El Señor aniquila a sus contrarios, el altísimo truena desde el cielo; el Señor juzga los confines de la tierra, dará fuerza a su rey y levantará la frente de su ungido'.


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