Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Salmos 51:11 - Biblia Martin Nieto

11 Aparta tu rostro de mis faltas, cancela mis pecados.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

11 No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

11 No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

11 Aparta tu semblante de mis faltas, borra en mí todo rastro de malicia.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

11 ¡No me eches de tu presencia, Ni quites de mí tu santo Espíritu!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Aparta de mis errores tu mirada, borra todos mis delitos.

Féach an chaibidil Cóip




Salmos 51:11
23 Tagairtí Cros  

Tú me echas de aquí y tengo que ocultarme a tu mirada; errante y vagabundo andaré sobre la tierra, y cualquiera que me encuentre me matará'.


El Señor dijo: 'Mi espíritu no permanecerá por siempre en el hombre, porque es de carne. Sus días serán ciento veinte años'.


Pero no le retiraré mi favor, como se lo retiré a Saúl, a quien rechacé de mi presencia.


pero el Señor tuvo compasión de ellos y, en atención a su pacto con Abrahán, Isaac y Jacob, no quiso destruirlos, y hasta el presente no los ha echado de su presencia.


Y el Señor dijo: 'Apartaré también de mi presencia a Judá, como aparté a Israel; y rechazaré a esta ciudad, Jerusalén, que había elegido, y el templo, del que había dicho: Allí estará mi nombre'.


Por eso, el Señor montó en cólera contra Jerusalén y contra Judá y los apartó de su presencia. Sedecías se rebeló contra el rey de Babilonia.


Pues tú eres, oh Dios, mi fortaleza, ¿por qué me has rechazado?, ¿por qué he de andar yo triste, bajo la opresión de mi enemigo?


ahora que estoy viejo y encanecido, oh Dios, no me abandones, para que pueda anunciar a esta generación las obras de tu brazo, y tu poder a las edades venideras.


No me rechaces ahora que soy viejo, no me abandones cuando me faltan ya las fuerzas.


Os echaré de mi presencia, como eché a todos vuestros hermanos, a toda la estirpe de Efraín.


Pues si vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a quienes se lo piden?'.


pero el defensor, el Espíritu Santo, el que el Padre enviará en mi nombre, él os lo enseñará todo y os recordará todo lo que os he dicho'.


constituido Hijo de Dios en poder según el Espíritu de santificación por su resurrección de la muerte) Jesucristo, nuestro Señor,


pero vosotros no vivís según la carne, sino según el espíritu, si es que el Espíritu de Dios habita en vosotros. Pues si alguno no tiene el Espíritu de Cristo no es de Cristo.


No entristezcáis al Espíritu Santo de Dios, que os ha marcado con su sello para distinguiros el día de la liberación.


Todos éstos sufrirán el castigo de una perdición eterna lejos de la presencia del Señor y de su gloria esplendorosa,


Y el espíritu del Señor comenzó a actuar en él en el campo de Dan, entre Sorá y Estaol.


Cuando llegó a Lejí, los filisteos corrieron a su encuentro. Entonces el espíritu del Señor se apoderó de él; las sogas con que estaba atado fueron como hilos de lino quemados por el fuego y las ataduras de sus brazos se deshicieron.


Ella dijo: '¡Sansón, los filisteos!'. Él se despertó y se dijo: 'Saldré como tantas otras veces y me las arreglaré'. Pero no sabía que el Señor lo había abandonado.


Cuando llegaron a Guibeá se encontraron con un grupo de profetas; el espíritu del Señor se apoderó de Saúl, y profetizó como ellos.


El espíritu del Señor se había retirado de Saúl, y un espíritu maligno, enviado por el Señor, se apoderó de él.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí