Salmos 103:1 - Biblia Martin Nieto

¹ De David

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹ Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ Que todo lo que soy alabe al Señor; con todo el corazón alabaré su santo nombre.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Bendice al Señor, alma mía, alabe todo mi ser su santo Nombre.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ De David. Bendice alma mía a YHVH, Y bendiga todo mi ser su santo Nombre.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ De David. Bendice, alma mía, al Señor, y todo mi interior, su santo nombre;

Salmos 103:1 Tagairtí Cros

Salmos 103:22

Bendecid al Señor todas sus obras, en todos los lugares de su imperio. Bendice, alma mía, al Señor.

Salmos 104:1

Bendice, alma mía, al Señor. Señor, Dios mío, qué grande eres. Vestido de esplendor y majestad,

Salmos 111:1

¡Aleluya! Doy gracias al Señor de todo corazón en la reunión de los hombres justos y en la asamblea general.

Salmos 138:1

De David

Salmos 145:1

Himno de David

Salmos 47:7

Cantad a Dios, cantad; cantad a nuestro rey, cantad;

Salmos 63:5

toda mi vida te bendeciré, en tu nombre levantaré mis manos;

Salmos 99:3

Alabado sea su nombre grande y terrible, Dios es santo.

Isaías 6:3

Y se gritaban el uno al otro Santo, santo, santo, Señor todopoderoso; la tierra toda está llena de su gloria.

Juan 4:24

Dios es espíritu, y sus adoradores han de adorarlo en espíritu y en verdad'.

1 Corintios 14:15

¿Qué debo hacer entonces? Debo orar con el espíritu, pero también con el entendimiento; debo cantar con el espíritu, pero también con el entendimiento.

Filipenses 1:9

Y le pido que vuestro amor crezca cada día más en conocimiento y en discreción,

Colosenses 3:16

Que la palabra de Cristo viva entre vosotros con toda su riqueza. Enseñaos y aconsejaos unos a otros con talento. Con profundo agradecimiento cantad a Dios salmos, himnos y canciones religiosas.

Apocalipsis 4:8

Los cuatro animales tenían cada uno seis alas, y alrededor y en el interior estaban llenos de ojos. Y repetían sin cesar día y noche: Santo, santo, santo es el Señor, el todopoderoso, el que era, el que es, el que viene.