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Malaquías 3:2 - Biblia Martin Nieto

2 ¿Quién podrá soportar el día de su venida? ¿Quién subsistirá cuando aparezca? Será como el fuego del fundidor y como la lejía de las lavanderas.

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Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

2 ¿Y quién podrá soportar el tiempo de su venida? ¿o quién podrá estar en pie cuando él se manifieste? Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

2 «Pero ¿quién será capaz de soportar su venida? ¿Quién podrá mantenerse de pie y estar cara a cara con él cuando aparezca? Pues él será como un fuego abrasador que refina el metal o como un jabón fuerte que blanquea la ropa.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

2 ¿Quién podrá mantenerse en pie cuando aparezca? Pues él es como el fuego de una fundición y como la lejía que se usa para blanquear.

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La Biblia Textual 3a Edicion

2 ¿Y quién soportará el día de su venida? ¿Y quién permanecerá cuando Él se manifieste? Porque Él es fuego de fundidor, y lejía de lavadores.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 ¿Quién soportará el día de su venida? ¿Quién resistirá en pie cuando Él aparezca? Porque será como fuego de fundidor, como lejía de lavandero.

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Malaquías 3:2
47 Tagairtí Cros  

Volvió la vista hacia Sodoma y Gomorra y hacia toda la vega, y vio cómo de la vega subía humo como el de un horno.


Hay para la plata un venero, y para el oro un lugar donde se purifica.


Si tienes en cuenta nuestros delitos, ¿quién podrá resistir, Señor?


Proclamaré el decreto que el Señor ha pronunciado: 'Tú eres mi hijo, yo mismo te he engendrado hoy.


Ante tu amenaza, oh Dios de Jacob, carros y caballos quedaron inmóviles.


Separa la escoria de la plata, y el platero hará una copa.


Venid, pues, y discutamos, dice el Señor. Aunque vuestros pecados sean como la grana, blanquearán como la nieve; si fueren rojos cual la púrpura, se volverán como la lana.


Se estremecen en Sión los pecadores, el terror invade a los criminales. ¿Quién de nosotros podrá resistir ante el fuego abrasador; quién resistirá estas llamas eternas?


Cuando el Señor haya lavado la mancha de las hijas de Sión y haya limpiado a Jerusalén de la sangre en ella derramada, cuando dicte la sentencia y ejecute la pena,


Aunque te laves con potasa y gastes lejía en abundancia, la mancha de tu iniquidad aún quedaría ante mí, dice el Señor Dios.


¿Aguantará tu corazón, permanecerán firmes tus manos el día en que yo te pida cuentas? Yo, el Señor, lo digo y lo hago.


También caerán algunos maestros, a fin de acrisolar, purificar y blanquear a los otros hasta el tiempo fijado, porque aún falta para el tiempo fijado.


El Señor da la voz al frente de sus tropas. Sí, innumerable es su ejército, poderoso el ejecutor de su palabra; sí, grande es el día del Señor, muy terrible; ¿quién podrá soportarlo?


Ante su ira, ¿quién podrá resistir? ¿Quién se mantendrá cuando su cólera se inflama? Su furor se derrama como fuego, y las rocas se funden ante él.


Y haré pasar por el fuego a esta tercera parte: la purificaré como se purifica la plata, y la probaré como se prueba el oro. Él invocará mi nombre, y yo le escucharé; yo diré: 'Éste es mi pueblo', y él dirá: 'El Señor es mi Dios'.


Mientras fueron a comprarlo, vino el esposo, y las que estaban dispuestas entraron con él a las bodas y se cerró la puerta.


Sus vestidos se volvieron de una blancura resplandeciente, como ningún batanero de la tierra podría blanquearlos.


Simeón los bendijo, y dijo a María, su madre: 'Este niño está destinado en Israel para que unos caigan y otros se levanten; será signo de contradicción


Estad alerta y orad en todo momento para que podáis libraros de todo lo que ha de venir y presentaros ante el hijo del hombre'.


Tiene en su mano el bieldo para aventar su parva, llevar el trigo a su granero y quemar la paja en fuego que no se apaga'.


Además, ya está el hacha puesta a la raíz de los árboles, y todo árbol que no dé buen fruto será cortado y echado al fuego'.


¡Y dichoso el que no se escandalice de mí!'.


y no lo conocéis; pero yo lo conozco. Si dijera que no lo conozco, sería un mentiroso como vosotros; pero lo conozco y guardo su palabra.


Cuidado con no escuchar al que os habla; pues si aquéllos, por no escuchar al que promulgaba oráculos en la tierra no escaparon al castigo, ¡con cuánta mayor razón no escaparemos nosotros si volvemos la espalda a aquel que habla desde el cielo!


y a él le ha concedido vestirse de lino fino, limpio y brillante. (El lino fino son las obras de justicia de los santos).


y a sus hijos los voy a herir de muerte; de este modo todas las Iglesias sabrán que soy yo el que penetra los sentimientos y los pensamientos, y os daré a cada uno según sus obras.


porque ha llegado el gran día de su ira, y ¿quién podrá resistir?


Yo le respondí: 'Señor, tú lo sabes'. Él me dijo: 'Ésos son los supervivientes de la gran persecución, y han lavado sus vestiduras y las han blanqueado en la sangre del cordero.


Y las gentes de Bet Semes decían: '¿Quién podrá resistir al Señor, este Dios santo? Y ¿adónde enviaremos el arca, lejos de nosotros?'.


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