Job 2:8 - Biblia Martin Nieto

⁸ Job, con un cascote de teja para rascarse, fue a sentarse sobre las cenizas.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Y tomaba Job un tiesto para rascarse con él, y estaba sentado en medio de ceniza.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Job, sentado entre cenizas, se rascaba con un trozo de teja.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Job tomó entonces un pedazo de teja para rascarse y fue a sentarse en medio de las cenizas.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Y tomando un tiesto roto, se rascaba con él, estando sentado en medio de la ceniza.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Tomó Job un trozo de teja para rascarse y se recostó entre la basura.

Job 2:8 Tagairtí Cros

2 Samuel 13:19

Entonces Tamar echó polvo en su cabeza, rasgó la túnica y con las manos en la cabeza se marchó gritando.

Ester 4:1

Apenas supo Mardoqueo lo que se había hecho, rasgó sus vestiduras, se vistió de saco y ceniza y salió por la ciudad lanzando gritos de dolor: '¡Un pueblo inocente va a ser exterminado!'.

Ester 4:3

En todas las provincias y lugares donde fue publicado el edicto del rey no había más que luto, ayunos, lloros y lamentos por parte de los judíos. El saco y las cenizas fueron el lecho de muchos.

Job 2:9

Su mujer le dijo: '¿Todavía perseveras en tu rectitud? ¡Maldice a Dios y muere!'.

Job 42:6

Por eso retracto mis palabras y en polvo y ceniza hago penitencia.

Salmos 38:5

mis delitos sobrepasan mi cabeza, me aplastan como un peso insoportable;

Salmos 38:7

cabizbajo, totalmente abrumado, todo el día ando triste;

Isaías 61:3

a dar a todos los afligidos de Sión una diadema en lugar de ceniza, perfume de alegría en lugar del vestido de luto, alabanza en lugar de espíritu abatido. Se les llamará encinas de justicia, plantación del Señor para su gloria.

Jeremías 6:26

Hija de mi pueblo, vístete de saco, échate en la ceniza, ponte de luto como por un hijo único, con amargos lamentos. Porque cae de improviso el devastador sobre nosotros.

Ezequiel 27:30

Y lanzarán su clamor por ti, gritarán amargamente, se echarán polvo sobre sus cabezas, se revolcarán en la ceniza.

Jonás 3:6

El rey de Nínive, al enterarse, se levantó de su trono, se quitó el manto, se vistió de saco y se sentó en el suelo.

Mateo 11:21

'¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida!, porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en vosotras, haría ya tiempo que se hubieran arrepentido cubiertas de saco y ceniza.