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Isaías 28:6 - Biblia Martin Nieto

6 espíritu de justicia para el que se sienta a juzgar, y espíritu de fortaleza para el que rechaza a los que asaltan la puerta.

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Biblia Reina Valera 1960

6 y por espíritu de juicio al que se sienta en juicio, y por fuerzas a los que rechacen la batalla en la puerta.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Él dará a sus jueces anhelo de justicia, y gran valentía a sus guerreros que vigilan las puertas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Pues se hará espíritu de justicia para el juez en el tribunal, le ayudará a hacer justicia, y al que impide que los asaltantes pasen la puerta le dará valentía.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Sentido de justicia para los que se sienten a juzgar, Valor para los que rechazan el asalto a la puerta.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 espíritu de justicia, para el que preside el tribunal; y fortaleza de los que rechazan a los atacantes en la puerta.

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Isaías 28:6
22 Tagairtí Cros  

Todo Israel se enteró de la sentencia que el rey había pronunciado y todos temieron al rey, viendo que había en él una sabiduría divina para administrar justicia.


Puso jefes militares al frente del pueblo, reunió a todos en la plaza de la puerta de la ciudad y les dirigió a todos esta arenga:


Con él no hay más que brazos de carne; con nosotros está el Señor, nuestro Dios, pronto a socorrernos y combatir nuestros combates'. El pueblo cobró ánimo con las palabras de Ezequías, rey de Judá.


Al maestro de coro. Cántico de los hijos de Coré. Según: 'Las vírgenes...'


Dejad las armas, reconoced que yo soy Dios, por encima de las naciones, por encima de la tierra.


Un rey sentado sobre el trono del juicio disipa con su mirada todo mal.


porque tú eres un refugio para el desvalido, un refugio para el pobre en su angustia, abrigo contra el aguacero, sombra contra el calor; pues el soplo de los tiranos es como la lluvia que azota la pared,


Excelso es el Señor; en las alturas mora, y llena a Sión de derecho y justicia.


Cuando el Señor haya lavado la mancha de las hijas de Sión y haya limpiado a Jerusalén de la sangre en ella derramada, cuando dicte la sentencia y ejecute la pena,


Entonces los jefes de Judá se dirán: 'Los habitantes de Jerusalén tienen su fuerza en el Señor todopoderoso, su Dios'.


Porque el que Dios ha enviado dice las palabras de Dios, pues Dios le ha dado su espíritu sin medida.


Yo no puedo hacer nada por mí mismo. Yo juzgo como me ordena el Padre, y mi juicio es justo porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.


Así, el Espíritu a uno le concede hablar con sabiduría; a otro, por el mismo Espíritu, hablar con conocimiento profundo;


pues el Señor, vuestro Dios, va delante de vosotros para combatir con vosotros contra vuestros enemigos y daros la victoria.


Yo te lo mando. Sé fuerte y ten ánimo. No temas ni te asustes, porque el Señor, tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas'.


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