Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Ezequiel 12:2 - Biblia Martin Nieto

2 'Hijo de hombre, tú vives en medio de la raza de rebeldes. Tienen ojos para ver y no ven, oídos para oír y no oyen; son un pueblo de rebeldes.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

2 Hijo de hombre, tú habitas en medio de casa rebelde, los cuales tienen ojos para ver y no ven, tienen oídos para oír y no oyen, porque son casa rebelde.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 «Hijo de hombre, tú vives entre rebeldes que tienen ojos pero se niegan a ver; tienen oídos pero se niegan a oír, porque son un pueblo rebelde.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 Hijo de hombre, tú vives en medio de rebeldes, que tienen ojos para ver pero no ven, oídos para oír y no oyen. Realmente son una banda de rebeldes.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Hijo de hombre, tú habitas en medio de una casa rebelde, los cuales tienen ojos para ver y no ven; y tienen oídos para oír y no oyen, porque son casa rebelde.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 'Hijo de hombre, estás viviendo entre gente rebelde, que tienen ojos para ver y no ven, oídos para oír y no oyen, pues son gente rebelde.

Féach an chaibidil Cóip




Ezequiel 12:2
46 Tagairtí Cros  

Pero no hicieron caso, tuvieron una cabeza dura, como sus padres, que no confiaron en el Señor, su Dios;


rechazaron sus preceptos, la alianza que había hecho con sus padres y las amonestaciones que les había dirigido, siguieron a ídolos vanos y se hicieron ellos mismos vanos imitando a las gentes circunvecinas, siendo así que el Señor les había ordenado que no obrasen como ellas.


¡Cuántas veces en el desierto lo irritaron, lo provocaron en aquellas soledades!


Tus jefes son unos rebeldes, compinches de ladrones; todos hambrean recompensas y van detrás de los regalos; no hacen justicia al huérfano, ni atienden la causa de la viuda.


¡Ay de estos hijos rebeldes! -dice el Señor-. Ejecutan proyectos que no son los míos; conciertan pactos, mas no según mi espíritu, de modo que acumulan pecado tras pecado.


Porque es un pueblo rebelde, hijos mentirosos, que no quieren oír la voz del Señor.


Traed al pueblo ciego, aunque tiene ojos; a los sordos, aunque tienen oídos.


No saben ni entienden nada; sus ojos están cerrados a toda visión y su corazón a toda inteligencia.


Yo exclamé: ¡Ay de mí, estoy perdido, pues soy hombre de labios impuros; vivo entre un pueblo de labios impuros, y mis ojos han visto al rey, al Señor todopoderoso.


He tendido sin cesar mis manos hacia un pueblo rebelde, que caminaba por el mal camino tras sus propios caprichos;


Como guardas de campo cercan a Jerusalén por haberse rebelado contra mí, dice el Señor.


Escucha, pueblo necio e insensato, que tiene ojos y no ve, oídos y no oye.


Pero este pueblo tiene un corazón indómito y rebelde; se han apartado y se han ido.


Pero no me escucharon ni me hicieron caso. Endurecieron su cabeza y se portaron peor que sus padres.


Pues yo, el Señor, hablaré. Todo cuanto yo diga será dicho y hecho sin tardanza. Porque será en vuestro tiempo, oh gente rebelde, cuando yo diré algo y lo cumpliré', dice el Señor Dios.


'Di a esta raza rebelde: ¿No sabéis lo que significa todo esto? Diles: Mirad, el rey de Babilonia llegó a Jerusalén, tomó a su rey y a sus príncipes y los llevó a Babilonia.


Él me dijo: 'Hijo de hombre, yo te envío a los israelitas, a un pueblo de rebeldes, que se han rebelado contra mí, ellos y sus padres, hasta este mismo día.


Después di esta parábola a esa raza de rebeldes. Esto dice el Señor Dios: Arrima la olla, arrímala, y echa agua en ella.


he hecho tu frente dura como el diamante, más dura que la roca. No los temas ni te asustes de ellos. Son una raza de rebeldes'.


Dirás a los rebeldes, a la casa de Israel: Esto dice el Señor Dios: Ya son demasiadas las monstruosidades que habéis cometido, oh casa de Israel;


para que aunque miren no vean y aunque oigan no entiendan, no sea que se conviertan y sean perdonados'.


Él dijo: 'A vosotros se os ha dado conocer los secretos del reino de Dios, pero a los demás sólo en parábolas, para que aunque miren no vean y aunque oigan no entiendan.


Les has cegado sus ojos y has embotado su mente para que sus ojos no vean ni su mente comprenda; así no podrán convertirse ni yo los tendré que sanar.


Pero sus entendimientos se embotaron, y aquel velo permanece de tal modo que les impide comprender el Antiguo Testamento, y no se dan cuenta de que Cristo ha descorrido ya el velo.


y su mente oscurecida, apartados de la vida de Dios por su ignorancia y la dureza de su corazón;


Pero hasta la fecha, el Señor no os ha dado inteligencia para entender, ojos para ver y oídos para escuchar.


Durante cuarenta años os he hecho caminar por el desierto, sin que se os hayan gastado los vestidos y el calzado.


porque yo sé que eres un pueblo rebelde y de cabeza dura. Si hoy, cuando yo estoy todavía en medio de vosotros, sois rebeldes al Señor, cuánto más lo seréis después de mi muerte.


Habéis sido rebeldes al Señor desde el día mismo en que os conoció.


Acuérdate no lo olvides: tú irritaste al Señor, tu Dios, en el desierto; desde el día en que saliste de Egipto hasta el día de vuestra entrada en este lugar habéis sido rebeldes al Señor.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí