Ezequiel 10:6 - Biblia Martin Nieto

⁶ El hombre vestido de lino, al recibir la orden de tomar fuego del carro de entre los querubines, fue y se paró junto a la rueda.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

⁶ Aconteció, pues, que al mandar al varón vestido de lino, diciendo: Toma fuego de entre las ruedas, de entre los querubines, él entró y se paró entre las ruedas.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ El Señor le dijo al hombre vestido de lino: «Métete entre los querubines y toma algunos carbones encendidos de entre las ruedas». Entonces el hombre entró y se paró junto a una de las ruedas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Dio esta orden al hombre vestido de lino: 'Saca fuego de entre medio de las ruedas y de los querubines. El hombre se aproximó y se puso al lado de la rueda.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ Y cuando mandó al varón vestido de lino blanco, diciendo: Toma fuego de adentro de las ruedas, de en medio de los querubines, él entró y se quedó en pie junto a una de las ruedas.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Cuando el hombre vestido de lino recibió la orden de tomar fuego de entre las ruedas, de entre los querubines, entró y se paró junto a la rueda.

Ezequiel 10:6 Tagairtí Cros

Salmos 80:1

Al maestro de coro. Según 'Lirios son los preceptos'. Salmo de Asaf

Salmos 99:1

El Señor es rey, tiemblen las naciones; se sienta sobre querubines, vacile la tierra.

Ezequiel 10:2

Y dijo al hombre vestido de lino: 'Métete por entre las ruedas, debajo del querubín, toma a manos llenas brasas ardientes de entre los querubines y espárcelas por la ciudad'. Y vi que entró.

Ezequiel 10:5

El rumor de las alas de los querubines llegaba hasta el atrio exterior, semejante a la voz del todopoderoso cuando habla.

Ezequiel 10:7

Entonces el querubín alargó su mano al fuego que estaba entre los querubines, tomó parte de él y lo puso en las manos del hombre vestido de lino, el cual lo tomó y salió.

Daniel 7:9

Yo seguía observando: se instalaron unos tronos, y un anciano se sentó. Sus vestiduras eran blancas como la nieve; como lana pura el cabello de su cabeza; su trono era de llamas, con ruedas de fuego ardiente.