Deuteronomio 14:1 - Biblia Martin Nieto

¹ Vosotros sois los hijos del Señor, vuestro Dios. No os haréis cortaduras ni os raparéis el pelo de la frente por un muerto.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹ Hijos sois de Jehová vuestro Dios; no os sajaréis, ni os raparéis a causa de muerto.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ »Israel, dado que eres el pueblo del Señor tu Dios, nunca te hagas cortaduras en el cuerpo ni te afeites el cabello que está encima de la frente en señal de duelo por un muerto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Yavé, Dios de ustedes, los tiene por sus hijos. No se hagan incisiones ni se corten el pelo en la frente por un difunto.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ Hijos sois de YHVH vuestro Dios. No os sajaréis ni os rasuraréis entre los ojos° por causa de un muerto,°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Hijos sois para Yahveh, vuestro Dios. No os hagáis incisiones ni os tonsuréis entre los ojos por un muerto;

Deuteronomio 14:1 Tagairtí Cros

Génesis 6:2

los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, y tomaron por esposas las que más les gustaron.

Génesis 6:4

En aquel entonces había gigantes en la tierra (y también después), cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas de los hombres, y ellas les daban hijos. Éstos son los héroes de antaño, hombres famosos.

1 Reyes 18:28

Ellos, entonces, gritaban más fuerte, y según su costumbre, se hacían cortes con espadas y lanzas, hasta chorrear sangre por su cuerpo.

Isaías 63:16

porque tú eres nuestro padre! Pues Abrahán no nos conoce, ni Israel se acuerda de nosotros. Tú, Señor, eres nuestro padre; nuestro libertador es tu nombre desde antiguo.

Jeremías 16:6

Grandes y pequeños morirán en este país sin ser sepultados ni llorados; por ellos no se harán cortes en el cuerpo ni se raparán el cabello.

Jeremías 3:19

Y yo me decía: ¿Te contaré entre mis hijos y te daré un país de delicias, la heredad más preciosa de las naciones? Yo pensaba: Me llamarás padre, y ya no te alejarás de mí.

Jeremías 31:9

Entre lágrimas habían partido, entre consuelos los devuelvo junto a los arroyos de las aguas, por un camino llano, donde no dan traspiés. Pues soy un padre para Israel, Efraín es mi primogénito.

Jeremías 41:5

llegaron de Siquén, de Silo y de Samaría ochenta hombres con la barba rapada, los vestidos rasgados y el cuerpo lleno de cortaduras, trayendo ofrendas e incienso para ofrecerlos en el templo del Señor.

Jeremías 47:5

Gaza está rapada al cero, Ascalón está en silencio y tú, Asdod, resto de los anaquitas, ¿hasta cuándo te harás cortaduras?

Levítico 21:5

No se raparán la cabeza, no rasurarán los bordes de su barba ni se harán cortes en su cuerpo.

Juan 1:12

A todos los que lo reciben, / a los que creen en su nombre, / les da el ser hijos de Dios; /

Juan 11:52

y no sólo por la nación, sino también para reunir a los hijos de Dios dispersos.

Romanos 8:16

El mismo Espíritu da testimonio juntamente con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.

Romanos 9:26

Y donde les dije: Vosotros no sois mi pueblo, allí serán llamados hijos del Dios vivo.

Romanos 9:4

son los israelitas, a los que Dios adoptó como hijos y a los que se apareció gloriosamente; de ellos es la alianza, la ley, el culto y las promesas;

Romanos 9:8

Esto quiere decir que los hijos de Dios no son los que pertenecen a una raza, sino los que nacen en virtud de la promesa.

2 Corintios 6:18

seré para vosotros Padre, y vosotros seréis para mí hijos e hijas, dice el Señor todopoderoso.

Gálatas 3:26

Porque todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús;

Deuteronomio 13:18

De lo que se ha destinado al exterminio no guardarás nada para ti, para que se aplaque el furor de la ira del Señor, tenga compasión de ti y te haga crecer en número tal como se lo prometió a tus padres,

Deuteronomio 32:6

¿Así pagáis al Señor, / pueblo insensato y necio? / ¿No es él tu padre y tu creador? / ¿No es él el que te hizo y te constituyó?

1 Tesalonicenses 4:13

Hermanos, no queremos que ignoréis la suerte de los difuntos, para que no os aflijáis como los que no tienen esperanza.

Hebreos 2:10

Convenía, en efecto, que aquel por quien y para quien todo fue hecho, queriendo llevar a la gloria un gran número de hijos, hiciese perfecto, mediante los sufrimientos, al jefe que debía guiarlos a la salvación.

1 Juan 3:10

En esto se distinguen los hijos de Dios y los hijos del diablo: el que no practica la justicia no es de Dios, ni el que no ama a su hermano.

1 Juan 5:2

En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios: en que amamos a Dios y guardamos sus mandamientos.