Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





2 Crónicas 33:23 - Biblia Martin Nieto

23 Pero no se humilló delante del Señor, como se había humillado su padre Manasés; al contrario, aumentó su culpabilidad.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

23 Pero nunca se humilló delante de Jehová, como se humilló Manasés su padre; antes bien aumentó el pecado.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

23 pero a diferencia de su padre, no se humilló ante el Señor, sino que Amón pecó aún más.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Pero no se humilló delante de Yavé como lo había hecho su padre Manasés. Al contrario, Amón cometió aún más pecados.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

23 Pero no se humilló delante de YHVH, como se había humillado Manasés su padre, sino que este Amón aumentó su culpa.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 Pero no se humilló ante Yahveh, como se había humillado su padre Manasés, sino que Amón cometió pecados aún mayores.

Féach an chaibidil Cóip




2 Crónicas 33:23
9 Tagairtí Cros  

Mientras estaba asediado, el rey Acaz aumentó sus pecados contra el Señor.


Manasés tenía doce años cuando subió al trono, y reinó cincuenta y cinco años en Jerusalén.


En medio de su angustia imploró al Señor, su Dios, y se humilló profundamente delante del Dios de sus padres.


Su oración y su acogida, todas sus prevaricaciones y su impiedad, los lugares en los que levantó altares y puso imágenes de Aserá e ídolos antes de su conversión, están escritos en las crónicas de Jozay.


Hizo lo que es malo a los ojos del Señor, su Dios, y no quiso humillarse delante del profeta Jeremías, el cual hablaba en nombre del Señor.


Pero no me escucharon ni me hicieron caso. Endurecieron su cabeza y se portaron peor que sus padres.


Tendrían que avergonzarse de sus acciones execrables, pero han perdido la vergüenza; no saben ya ni sonrojarse. Por eso han de caer entre los que perecen; se desplomarán cuando yo los visite, -dice el Señor-.


Y tú, Baltasar, hijo suyo, tampoco has conservado humilde tu corazón, a pesar de que sabías todo esto;


Los hombres malvados irán de mal en peor; engañarán y serán engañados.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí