2 Crónicas 32:15 - Biblia Martin Nieto15 Así que no os dejéis engañar por Ezequías ni os dejéis seducir de esta manera. No le creáis, porque si ningún dios de nación o reino alguno pudo salvar a su pueblo de mi poder y del poder de mis padres, mucho menos podrá libraros a vosotros vuestro Dios'. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196015 Ahora, pues, no os engañe Ezequías, ni os persuada de ese modo, ni le creáis; que si ningún dios de todas aquellas naciones y reinos pudo librar a su pueblo de mis manos, y de las manos de mis padres, ¿cuánto menos vuestro Dios os podrá librar de mi mano? Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente15 ¡No dejen que Ezequías los engañe! ¡No permitan que se burle así de ustedes! Lo vuelvo a repetir: ningún dios de ninguna nación o reino jamás ha sido capaz de librar a su pueblo de mí o de mis antepasados. ¡Mucho menos podrá su Dios librarlos a ustedes de mi poder!”». Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)15 Así, pues, que no los engañe Ezequías ni los seduzca con vanas promesas. No lo crean. Ningún Dios de ninguna nación o reino ha podido salvar a su pueblo de mi mano, ni de la mano de mis padres. ¡Cuánto menos podrán los dioses de ustedes librarlos de mi mano!' Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion15 Ahora pues, no os engañe Ezequías haciéndoos creer tales cosas, porque ningún dios de nación o reino alguno ha podido librar a su pueblo de mi mano ni de la mano de mis padres. ¡Cuánto menos vuestro Dios podrá libraros de mi mano! Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197515 Ahora, pues, que no os engañe Ezequías, ni os seduzca de este modo. No lo creáis. Porque si ningún dios de cualquier otro pueblo o reino pudo librar a su gente de mi mano ni de las manos de mis padres, ¡cuánto menos podrá libraros de mi mano vuestro Dios!'. Féach an chaibidil |
¿Estáis dispuestos cuando oigáis sonar el cuerno, el pífano, la cítara, la sambuca, el salterio, la zampoña y toda clase de instrumentos musicales a postraros y adorar la estatua que he hecho? Si no la adoráis, seréis inmediatamente arrojados en un ardiente horno de fuego; y ¿qué Dios os podrá librar de mis manos?'.