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Nahúm 3:6 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

6 Voy a embarrarte de excremento, y quedarás en vergüenza.

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Biblia Reina Valera 1960

6 Y echaré sobre ti inmundicias, y te afrentaré, y te pondré como estiércol.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Te cubriré con inmundicias y mostraré al mundo lo vil que eres.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Arrojaré inmundicias sobre ti, te deshonraré y te pondré como espectáculo

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Te arrojaré basura encima, te haré vil, Y te expondré a la pública vergüenza.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Lanzaré contra ti tus inmundicias, te afrentaré y haré escarnio de ti.

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Nahúm 3:6
19 Tagairtí Cros  

me convierte en ceniza y me deja caer en el fango.


Son gente de mala fama; ¡por eso los echaron del país!


Dios me arrojará al basurero, ¡y no habrá ropa que me cubra!


y Babilonia quedará en ruinas; allí vivirán solo perros salvajes. Babilonia será un país sin gente, del que todo el mundo se burlará.


Estoy completamente derrotado, porque Dios me hizo caer.


voy a reunir a todas esas naciones, y delante de todas ellas te humillaré.


pero yo te humillaré a ti, pues no mereces ninguna alabanza; yo te dejaré en vergüenza; tu orgullo se volverá humillación.


»¡Así quedará esa ciudad orgullosa, que se sentía muy segura! ¡Así quedará la ciudad que se creía incomparable! ¡Quedará hecha un montón de ruinas, un refugio de animales salvajes! Los que la vean destruida se alegrarán y se burlarán de ella.


Si no me obedecen ni aprenden a respetarme, yo los maldeciré. Si no me sirven con sinceridad, cambiaré en maldición mis bendiciones para ustedes. Además, les quitaré el poder y les untaré en la cara el estiércol de los animales que me ofrecen. ¡Entonces los barrerán a ustedes junto con ese estiércol! Yo soy el Dios todopoderoso, y les juro que así lo haré.


»Si yo he hecho que el pueblo los desprecie y les pierda el respeto, es porque ustedes no me han obedecido, ni tratan con justicia a todos por igual».


Cuando hablan mal de nosotros, contestamos con palabras amables. Hasta ahora, se nos ha tratado como si fuéramos la basura del mundo.


Pero me parece que a nosotros, los apóstoles, Dios nos ha dejado en el último lugar. Parecemos prisioneros condenados a muerte. Somos el hazmerreír del mundo entero, ¡y hasta de los ángeles!


A muchos de ustedes sus enemigos los insultaron y los maltrataron delante de la gente, y en otras ocasiones ustedes sufrieron con quienes eran tratados así.


Algo parecido les sucedió a los que vivían en Sodoma y Gomorra, y en las ciudades cercanas. Los que vivían allí pecaron y practicaron todo tipo de relaciones sexuales prohibidas. Por eso Dios los castigó y los arrojó al fuego que nunca se apaga, para que sufran allí. Que esto sirva de advertencia para todos nosotros.


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