Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Hechos 26:1 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

1 El rey Agripa le dijo a Pablo: —Puedes hablar para defenderte. Pablo levantó su mano en alto y dijo:

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

1 Entonces Agripa dijo a Pablo: Se te permite hablar por ti mismo. Pablo entonces, extendiendo la mano, comenzó así su defensa:

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Entonces Agripa le dijo a Pablo: «Tienes permiso para hablar en tu defensa». Así que Pablo, haciendo una seña con la mano, comenzó su defensa:

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Agripa dijo a Pablo: 'Puedes hablar en tu defensa. Entonces Pablo extendió su mano y empezó a hablar así:'

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

1 Agripa dijo a Pablo: Se te permite hablar° en tu favor. Pablo, entonces, extendiendo la mano, comenzó así su defensa:

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Agripa, pues, le dijo a Pablo: 'Se te permite hablar en tu descargo'. Entonces Pablo, extendiendo la mano, comenzó su defensa.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 26:1
12 Tagairtí Cros  

En la presencia de reyes podré hablar de tus mandamientos y no sentirme avergonzado.


Yo los llamo, pero ustedes no me responden; les hago señas, pero ustedes no me hacen caso.


Es muy tonto y vergonzoso responder antes de escuchar.


El primero en defenderse alega ser inocente, pero llegan los testigos y afirman lo contrario.


Por eso te castigué. Por eso permití que perdieras parte de tu territorio. Por eso te dejé caer en manos de los filisteos, tus enemigos de siempre, ¡y hasta ellos se avergonzaron de tu mal comportamiento!


—Según nuestras leyes, no podemos condenar a nadie sin antes escucharlo.


«Escúchenme, amigos israelitas y líderes del país; ¡dejen que me defienda!»


Pero les dije que nosotros, los romanos, no acostumbramos ordenar la muerte de nadie sin que esa persona tenga la oportunidad de ver a sus acusadores y defenderse.


Porque no tendría sentido enviar a un preso sin decir de qué se le acusa.


—Me alegra poder hablar hoy delante de Su Majestad, el rey Agripa. Estoy contento porque podré defenderme de todas las acusaciones que hacen contra mí esos judíos.


Sin embargo, el Señor Jesús le dijo: —Ve, porque yo he elegido a ese hombre para que me sirva. Él hablará de mí ante reyes y gente que no me conoce, y ante el pueblo de Israel.


Pero del pueblo de Israel, Dios dijo por medio de Isaías: «Todo el día le ofrecí ayuda a un pueblo terco y desobediente.»


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí