1 Samuel 16:22 - La Biblia Textual 3a Edicion

²² Y Saúl envió a decir a Isaí: Te ruego que David se quede delante de mí, pues ha hallado gracia ante mis ojos.

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Biblia Reina Valera 1960

²² Y Saúl envió a decir a Isaí: Yo te ruego que esté David conmigo, pues ha hallado gracia en mis ojos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²² Luego Saúl mandó un recado a Isaí con una petición: «Por favor, permite que David quede a mi servicio, porque me simpatiza mucho».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²² Saúl mandó a decir a Jesé: 'Dale permiso a David para que se quede a mi servicio porque me cae simpático'.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²² Luego Saúl envió a decir a Jesé: 'Te ruego que David se quede a mi servicio, pues me es grata su compañía'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²² Y Saúl envió a decir a Isaí: Yo te ruego que esté David conmigo; porque ha hallado gracia en mis ojos.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

^22-23 Por eso Saúl le mandó a decir a Jesé: «Estoy muy contento con tu hijo. Déjalo que se quede conmigo, para que sea mi ayudante».

1 Samuel 16:22 Tagairtí Cros

Génesis 30:27

Pero Labán le respondió: Si he hallado gracia a tus ojos… He percibido que YHVH me ha bendecido por tu causa.

Génesis 39:4

Y José halló gracia ante sus ojos, y le servía. Y él lo puso a cargo de su casa, y entregó en su mano todo lo que tenía.

Salmos 131:1

Cántico gradual. De David Oh YHVH, mi corazón no se ha ensoberbecido ni mis ojos se han enaltecido; No he andado en pos de grandezas, ni en cosas demasiado sublimes para mí.

Daniel 1:5

El rey les asignó su ración diaria de la mesa real, y del vino que él bebía, para alimentarlos durante tres años, al cabo de los cuales pasarían a servir al rey.

Deuteronomio 1:38

y Josué ben Nun, que está delante de ti para servirte, él entrará allá. Anímale, porque él hará que Israel la herede.

1 Samuel 16:21

Y David fue a Saúl, y se quedó con él, y llegó a estimarlo grandemente, y lo hizo su escudero.

1 Samuel 16:23

Y cuando el espíritu de parte de Dios acometía a Saúl, David tomaba el arpa y la tañía con su mano, y Saúl se sentía aliviado y mejoraba, y el mal espíritu se apartaba de él.