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Números 11:23 - Nueva Biblia Española (1975)

23 El Señor dijo a Moisés: ¿Tan mezquina es la mano de Dios? Ahora verás si se cumple mi palabra o no.

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Biblia Reina Valera 1960

23 Entonces Jehová respondió a Moisés: ¿Acaso se ha acortado la mano de Jehová? Ahora verás si se cumple mi palabra, o no.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

23 Entonces el Señor le dijo a Moisés: —¿Acaso mi brazo ha perdido su poder? ¡Ahora verás si mi palabra se cumple o no!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Yavé le dijo a Moisés: '¡Así que la mano de Yavé es muy corta! Ahora verás si mi palabra se cumple o no.

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La Biblia Textual 3a Edicion

23 Y YHVH respondió a Moisés: ¿Acaso se ha acortado la mano de YHVH? ¡Ahora verás si se te cumple o no mi palabra!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 Yahveh respondió a Moisés: '¿Acaso ha perdido su vigor el brazo de Yahveh? Vas a ver ahora si lo que te he dicho se cumple en favor tuyo o no'.

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Números 11:23
21 Tagairtí Cros  

¿Hay algo difícil para Dios? Cuando vuelva a visitarte por esta época, dentro del tiempo de costumbre, Sara habrá tenido un hijo.


El sirviente replicó: ¿Qué hago yo con esto para cien personas? Eliseo insistió: Dáselos a la gente, que coman. Porque así dice el Señor: Comerán y sobrará.


El valido del rey, que ofrecía su brazo al soberano, le replicó: Suponiendo que el Señor abriera las compuertas del cielo, ¿se cumpliría esa profecía? Eliseo le respondió: ¡Lo verás, pero no lo gustarás!


Volvían a tentar a Dios, a irritar al Santo de Israel,


El Señor respondió a Moisés: Pronto verás lo que voy a hacer a Faraón: a la fuerza los dejará marchar y aun los echará de su territorio.


¿Por qué cuando vengo no hay nadie, cuando llamo nadie responde? ¿Tan corta es mi mano que no puede redimir? ¿O es que no tengo fuerza para librar? Miren: Con un bramido seco el mar, convierto los ríos en desierto; por falta de agua se pudren sus peces, muertos de sed.


Mira, la mano del Señor no se queda corta para salvar ni es duro de oído para oír;


¿Por qué te portas como un hombre aturdido, como soldado incapaz de vencer? Tú estás con nosotros, Señor, llevamos tu nombre, no nos abandones.


¡Ay, mi Señor! Tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, con brazo extendido; nada es imposible para ti.


Yo soy el Señor, Dios de todos los humanos: ¿hay algo imposible para mí?


Porque yo, el Señor, diré lo que tenga que decir, y lo que diga se hará, no se retrasará más; sino que en sus días, casa rebelde, lo diré y lo haré -oráculo del Señor- .


Yo, el Señor, lo digo, lo realizo y sucede, no lo paso por alto, ni me apiado, ni me arrepiento. Según tu conducta y tus malas obras te juzgaré -oráculo del Señor- .


Se acercó al foso y gritó afligido: ¡Daniel, siervo del Dios vivo! ¿Ha podido salvarte de los leones ese Dios a quien veneras con tanta constancia?


¿Está maldita la casa de Jacob? ¿Se ha acabado la paciencia del Señor o van a ser tales sus acciones? '¿No son buenas mis palabras para el que procede rectamente?'.


Aunque matemos las vacas y las ovejas, no les bastará, y aunque reuniera todos los peces del mar, no les bastaría.


Dios no miente como el hombre ni se arrepiente a lo humano. ¿Puede decir y no hacer, puede prometer y no cumplir?


Jesús se les quedó mirando y les dijo: Humanamente eso es imposible, pero para Dios todo es posible.


El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.


para Dios no hay nada imposible.


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