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Éxodo 37:9 - Nueva Biblia Española (1975)

9 Estaban uno frente a otro, mirando al centro de la placa.

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Biblia Reina Valera 1960

9 Y los querubines extendían sus alas por encima, cubriendo con sus alas el propiciatorio; y sus rostros el uno enfrente del otro miraban hacia el propiciatorio.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Los querubines estaban frente a frente, mirando hacia la tapa de la expiación, con las alas extendidas por encima de la tapa para protegerla.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Los dos querubines tenían las alas extendidas y cubrían con sus alas el Lugar del Perdón. Estaban uno frente al otro y sus caras miraban al Lugar del Perdón.

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La Biblia Textual 3a Edicion

9 Y los querubines extendían sus alas en alto, y cubrían con sus alas el propiciatorio vueltos sus rostros el uno hacia el otro; y los rostros de los querubines estaban hacia el propiciatorio.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Ambos querubines tenían sus alas desplegadas en alto, protegiendo con ellas el propiciatorio; y sus rostros, el uno frente al otro, mirando al propiciatorio.

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Éxodo 37:9
15 Tagairtí Cros  

Y tuvo un sueño: 'Una rampa que arrancaba del suelo y tocaba el cielo con la cima. Mensajeros de Dios subían y bajaban por ella.


Echó al hombre, y a oriente del parque de Edén colocó a los querubines y la espada llameante que oscilaba, para cerrar el camino del árbol de la vida.


Salomón los colocó en medio del recinto interior, con las alas extendidas, de forma que sus alas exteriores llegaban a los dos muros, mientras que las alas interiores se tocaban una a otra en el centro del recinto.


Estarán uno frente a otro, mirando al centro de la placa.


Hizo la mesa de madera de acacia, de un metro de largo por cincuenta centímetros de ancho y setenta y cinco de alto.


cada uno arrancando de un extremo de la placa y cubriéndola con las alas extendidas hacia arriba.


Por encima de él había serafines erguidos, con seis alas cada uno: con dos alas se cubrían el rostro, con dos alas se cubrían el cuerpo, con dos alas se cernían.


Y le dijo: Sí, les aseguro: verán el cielo quedar abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar por este Hombre.


Y nosotros, que llevamos todos la cara descubierta y reflejamos la gloria del Señor, nos vamos transformando en su imagen con resplandor creciente; tal es el influjo del Espíritu' del Señor.


Así, desde el cielo, por medio de la Iglesia, se dan a conocer a las soberanías y autoridades las múltiples formas de la sabiduría de Dios,


más aún, cualquier cosa tengo por pérdida al lado de lo grande que es haber conocido personalmente al Mesías Jesús, mi Señor. Por él perdí todo aquello y lo tengo por basura con tal de ganar a Cristo


Sin discusión, grande es el misterio que veneramos: El se manifestó como hombre, lo rehabilitó el espíritu, se apareció a los mensajeros, se proclamó a las naciones, se le vio en el mundo, fue elevado a la gloría.


¿Qué son todos sino espíritus en servicio activo, que se envían en ayuda de los que han de heredar la salvación?


Indagaban ellos queriendo saber para cuándo y para qué circunstancia lo indicaba, y se les reveló que aquel ministerio profético no miraba a ellos, sino a ustedes. Ahora, por medio de los que les trajeron la buena noticia, se lo ha comunicado el Espíritu Santo enviado del cielo. Los ángeles se asoman deseosos de verlo.


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