Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Proverbios 26:4 - Biblia Reina Valera 1909

4 Nunca respondas al necio en conformidad á su necedad, Para que no seas tú también como él.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

4 Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, Para que no seas tú también como él.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 No respondas a los argumentos absurdos de los necios o te volverás tan necio como ellos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 No respondas a las estupideces de un imbécil, te volverías como él.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

4 No respondas al necio según su necedad, No sea que te iguales a él.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 No respondas al necio según su necedad, no sea que tú mismo te iguales a él.

Féach an chaibidil Cóip




Proverbios 26:4
14 Tagairtí Cros  

Y hablóles conforme al consejo de los mancebos, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré á vuestro yugo; mi padre os hirió con azotes, mas yo os heriré con escorpiones.


Y cuando todo el pueblo vió que el rey no les había oído, respondióle estas palabras, diciendo: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? No tenemos heredad en el hijo de Isaí. ¡Israel, á tus estancias! ¡Provee ahora en tu casa, David! Entonces Israel se fué á sus estancias.


El que comienza la pendencia es como quien suelta las aguas: Deja pues la porfía, antes que se enmarañe.


No hables á oídos del necio; Porque menospreciará la prudencia de tus razones.


Responde al necio según su necedad, Porque no se estime sabio en su opinión.


Si el hombre sabio contendiere con el necio, Que se enoje ó que se ría, no tendrá reposo.


Mas callaron, y no le respondieron palabra; porque el rey así lo había mandado, diciendo: No le respondáis.


No deis lo santo á los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los puercos; porque no las rehuellen con sus pies, y vuelvan y os despedacen.


No volviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino antes por el contrario, bendiciendo; sabiendo que vosotros sois llamados para que poseáis bendición en herencia.


Pero cuando el arcángel Miguel contendía con el diablo, disputando sobre el cuerpo de Moisés, no se atrevió á usar de juicio de maldición contra él, sino que dijo: El Señor te reprenda.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí