Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Mateo 6:27 - Biblia Reina Valera 1909

27 Mas ¿quién de vosotros podrá, congojándose, añadir á su estatura un codo?

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

27 ¿Acaso con todas sus preocupaciones pueden añadir un solo momento a su vida?

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

27 ¿Quién de ustedes, por más que se preocupe, puede añadir algo a su estatura?

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

27 Y ¿quién de vosotros puede, aun afanándose, añadir a su estatura un solo codo?°

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

27 ¿Quién de vosotros, por mucho que se afane, puede añadir una sola hora a su existencia?

Féach an chaibidil Cóip




Mateo 6:27
14 Tagairtí Cros  

He entendido que todo lo que Dios hace, ésto será perpetuo: sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y hácelo Dios, para que delante de él teman los hombres.


Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer un cabello blanco ó negro.


Por tanto os digo: No os congojéis por vuestra vida, qué habéis de comer, ó que habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir: ¿no es la vida más que el alimento, y el cuerpo que el vestido?


Y por el vestido ¿por qué os congojáis? Reparad los lirios del campo, cómo crecen; no trabajan ni hilan;


No os congojéis pues, diciendo: ¿Qué comeremos, ó qué beberemos, ó con qué nos cubriremos?


Así que, no os congojéis por el día de mañana; que el día de mañana traerá su fatiga: basta al día su afán.


Pero respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, cuidadosa estás, y con las muchas cosas estás turbada:


Y cuando os trajeren a las sinagogas, y á los magistrados y potestades, no estéis solícitos cómo ó qué hayáis de responder, ó qué hayáis de decir;


Y dijo á sus discípulos: Por tanto os digo: No estéis afanosos de vuestra vida, qué comeréis; ni del cuerpo, qué vestiréis.


Mas ahora Dios ha colocado los miembros cada uno de ellos en el cuerpo, como quiso.


Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con hacimiento de gracias.


Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí