Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Lucas 15:20 - Biblia Reina Valera 1909

20 Y levantándose, vino á su padre. Y como aun estuviese lejos, viólo su padre, y fué movido á misericordia, y corrió, y echóse sobre su cuello, y besóle.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

20 Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 »Entonces regresó a la casa de su padre, y cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio llegar. Lleno de amor y de compasión, corrió hacia su hijo, lo abrazó y lo besó.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Se levantó, pues, y se fue donde su padre. Estaba aún lejos, cuando su padre lo vio y sintió compasión; corrió a echarse a su cuello y lo besó.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Y levantándose, fue a su padre. Y estando él aún distante, su padre lo vio, y corriendo, enternecido, se echó sobre su cuello y lo besó efusivamente.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Partió, pues, y volvió a la casa de su padre. Todavía estaba lejos, cuando su padre lo vio venir y, hondamente conmovido, corrió a abrazarse a su cuello y lo besó repetidamente.

Féach an chaibidil Cóip




Lucas 15:20
22 Tagairtí Cros  

Y Esaú corrió á su encuentro, y abrazóle, y echóse sobre su cuello, y le besó; y lloraron.


Y echóse sobre el cuello de Benjamín su hermano, y lloró; y también Benjamín lloró sobre su cuello.


Y José unció su carro y vino á recibir á Israel su padre á Gosén; y se manifestó á él, y echóse sobre su cuello, y lloró sobre su cuello bastante.


Vino pues Joab al rey, é hízoselo saber. Entonces llamó á Absalom, el cual vino al rey, é inclinó su rostro á tierra delante del rey: y el rey besó á Absalom.


Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad;


Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.


¿Olvidaráse la mujer de lo que parió, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque se olviden ellas, yo no me olvidaré de ti.


Visto he sus caminos, y le sanaré, y le pastorearé, y daréle consolaciones, á él y á sus enlutados.


¿No es Ephraim hijo precioso para mí? ¿no es niño delicioso? pues desde que hablé de él, heme acordado de él constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él: apiadado, tendré de él misericordia, dice Jehová.


¿Cómo tengo de dejarte, oh Ehpraim? ¿he de entregarte yo, Israel? ¿cómo podré yo hacerte como Adma, ni ponerte como á Zeboim? Mi corazón se revuelve dentro de mí, inflámanse todas mis conmiseraciones.


Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como á uno de tus jornaleros.


Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo, y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.


Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.


Entonces hubo un gran lloro de todos: y echándose en el cuello de Pablo, le besaban,


Mas ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.


Y vino, y anunció la paz á vosotros que estabais lejos, y á los que estaban cerca:


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí